Tommy Rey tuvo guardia de honor de su banda y un sentido homenaje
Su féretro tuvo un emotivo paso por la Pérgola de las flores, una misa en la Catedral y una última ceremonia en Maipú.
Nicolás Labra G.
La segunda parte de la serie de homenajes que recibió Tommy Rey (Patricio Zúñiga) se vivió ayer en una mañana muy intensa y donde las muestras de cariño de los chilenos se volvieron a repetir tras conocerse su fallecimiento la noche del miércoles, producto de un infarto a los 80 años, cuando se encontraba en la Región de Valparaíso, donde residía hace años junto a su esposa.
El jueves ya se vivió un largo día debido al velatorio multitudinario que se realizó en el Teatro Caupolicán, que debió extender su jornada hasta las 20 horas con amplias filas para ingresar y darle su último adiós. Tras eso sus restos fueron llevados a la sede de la SCD en Providencia.
Ayer en la mañana el cortejo salió desde ese lugar en dirección a la Pérgola de las flores en la ribera del Río Mapocho. Temprano, Gloria Simonetti, vicepresidenta de la SCD, había recordado a la voz de 'La Sonora de Tommy Rey' y cómo su música influyó en la cultura nacional. "Nos gusta bailar, pero somos malos y él nos permitió bailar. Él no tenía parangón, tenía un estilo, era como Cecilia, también era único", señaló.
Sus restos pasaron por la Pérgola de las flores, donde el auto quedó bañado en pétalos, mientras las personas cantaban 'El galeón español', otra de las canciones que cobraron vida propia gracias a él, y 'La peineta', "Una que otra mirada va, mirada viene, mirada va", cantaba la gente.
El trayecto en las calles era expedito, pero sí se demoró su entrada a la Catedral en el centro de Santiago. Muchos querían despedirlo y el recinto llenó su capacidad en pocos minutos. El hijo de Simonetti, el sacerdote Cristián del Campo Simonetti, ofició la misa. Ahí se vivió uno de los momentos más emotivos. Su histórica banda, comandada por Leo Soto, le hizo guardia de honor en el lugar vestidos de impecable smoking negro, hasta el que también llegaron los integrantes de 'Los Viking's 5', encabezados por Pedro Barraza. "Nos vimos en La Cuca la última vez. Lo veíamos cansado, pero se subía al escenario y volvía a tener 20 años", recordó Barraza a Mega.
En la Catedral también apareció Aníbal Mosa. El presidente de Blanco y Negro puso una camiseta de Arturo Vidal en el féretro y aseguró que para la celebración del centenario de Colo Colo habrá un homenaje para el cantante, que grabó el himno del club en el disco '¡A lo campeón!', tras ganar la Copa Libertadores en 1991. "Venimos a honrarlo, todos los colocolinos estamos emocionados", dijo.
El último homenaje fue en el Cementerio Manantial de Maipú al que llegaron a eso de las 13:00 horas. Su féretro se dispuso al costado de un escenario, donde habían instrumentos montados. El caos fue tal en ese momento que se pidió orden desde el recinto. Se hizo un minuto de silencio y Juan David Rodríguez cantó el Ave María.
Tras eso, Leo Soto solicitó que el 26 de marzo, día de su fallecimiento, sea nombrado como el Día de la Cumbia Chilena. "Es el mejor cantante del género de nuestra tierra, el mejor de todos, un amigo, hermano, compañero de tantos escenarios. Vamos a donar estos uniformes al Museo de la Música Chilena", dijo.
Antes de la ceremonia privada se interpretó 'Un año más' y 'Daniela' al grito de "Viva Tommy Rey", una despedida a la altura del calificado estos días como La voz de Chile.