Arquitectos alertan falta de un plan de conservación de edificios patrimoniales
Destacan que se debe resguardar y mantener las casonas del Paseo Baquedano.
Como respuesta al devastador incendio que consumió el viernes la Parroquia San Antonio de Padua, arquitectos locales alertaron sobre la necesidad de generar un plan de conservación de otros edificios patrimoniales.
El templo destruido había sido declarado Monumento Nacional en la categoría de Monumento Histórico en 1994.
Carmen Valdivieso, directora de la Carrera de Arquitectura de la Universidad Arturo Prat, señaló que "muchas construcciones patrimoniales en Iquique obedecen a la normativa en materia de seguridad, pero en la época en que fueron erigidas no estaban relacionadas a estrategias directas con respecto a un plan de incendio".
La académica añadió que "el más claro ejemplo es la calle Baquedano, donde no existen muros de cortafuego, también hay que diferenciar entre un muro divisor y las normas hoy exigen una materialización, altura y otras exigencias que permiten además disminuir el riesgo de incendios. En este caso hay que hacer un plan de prevención para las construcciones de madera, para generar una gestión que ojalá esté apoyada por distintos actores, en este caso el Estado a través del Gobierno Regional y la academia también puede aportar, a fin de generar estrategias de mejoramiento para la conservación de los edificios patrimoniales".
Carlos Contreras, arquitecto iquiqueño con posgrado en gestión del patrimonio cultural, comentó que lo ocurrido es muestra del riesgo latente que tiene todo el patrimonio de madera de Iquique y la región. "La falta de mantención y la construcción de los edificios son un riesgo muy fuerte. Tenemos la calle Baquedano como zona típica, que ha ido evolucionando a un boulevard que tiene muchos restaurantes y con un uso mucho más turístico, constituye el vivo ejemplo del riesgo que podría ser un incendio generalizado".
El profesional agregó que "tenemos que entender que todo el patrimonio nacional que está en madera, el declarado y no declarado, está en riesgo latente y específicamente con el cambio climático que vivimos, donde las precipitaciones que se están dando afectan mucho al sistema eléctrico de estas construcciones. No olvidar que cuando cayó un poco de lluvia la semana pasada, se quemaron tres casas en el centro de Iquique (...) Creo que es importante que en los edificios de madera de uso público, como iglesias, restaurantes o museos, se deben realizar proyectos de modernización del sistema eléctrico, el sistema sanitario y las vías de seguridad como vías de evacuación y muros cortafuego".
El arquitecto Aldo Testa concuerda que se trata de una pérdida lamentable para el patrimonio de la ciudad, enfatizando que "muchas veces se designan edificios como monumentos patrimoniales, sin embargo, no hay ningún apoyo económico para mantenerlos y sobre todo de la parte eléctrica".
Afortunadamente, la parroquia cuenta con un estudio de diseño para su restauración, destacó Testa, pero agregó que "faltan fondos de mantención para las obras patrimoniales, preocupa lo que pasa con la Ex Aduana, que lleva muchos años sin restauración y el Palacio Astoreca que lleva meses con una pintura descascarada y no hay fondos. Tenemos una oficina del Consejo de Monumentos Nacionales, pero parece que no puede hacer mucho más. Espero que con esto se pueda crear una oficina de mantención de monumentos nacionales en Iquique y hacer estudios de restauración de viviendas como en el paseo Baquedano, donde falta rigurosidad sobre el cuidado del patrimonio".