Fortalecer la institucionalidad
Chile y la Región de Tarapacá están en un punto de inflexión respecto a la delincuencia organizada, uno de los fenómenos más preocupantes de los últimos años y la principal amenaza que hay sobre el Estado chileno.
Muchas experiencias en el mundo, especialmente América Latina y África, son los de los estados fallidos: territorios donde el aparato fiscal no tiene el monopolio del poder porque las organizaciones delictivas han ido apoderándose de los territorios.
Así, con pasmoso espanto, la sociedad ya se da cuenta que esto es una realidad en espacios urbanos de varias comunas de la Región Metropolitana y también de la Región de Tarapacá, que padecen el crecimiento de grupos dedicados al narcotráfico, la extorsión, la trata de personas, la prostitución, el robo y otros delitos de alta connotación.
Lo peor que puede ocurrirnos es seguir trivializando esta sombra y no tomar en serio el hecho de que el riesgo es mayúsculo. Las decisiones que se tomen ahora repercutirán por muchos años más y debemos ser conscientes de aquello.
La única forma de combatir este flagelo es calibrar la amenaza existente y ser inflexibles en contra de este tipo de grupos, lo que no significa romper el estado de derecho, sino que ser severos en la aplicación de las normativas.
Es fundamental tener una institucionalidad fuerte, organizaciones que estén interconectadas y que defiendan la legalidad y a las mayorías. Tarapacá, por sus condiciones económicas, sociales y territoriales, que incluyen una amplia y permeable frontera está siempre muy vulnerable a este problema, de modo que la urgencia es mayor para nuestro caso.
No deberíamos tener dobleces ni dudas en esto.
Pese a que las autoridades y las instituciones ligadas a la acción policial y penal están buscando mecanismos y más recursos para enfrentar todos estos flagelos, lo cierto es que queda mucho camino por recorrer, lo que lamentablemente se reafirmó, una vez más, en los últimos tres días, donde Iquique fue el escenario de tres balaceras en sectores residenciales. Afortunadamente no hubo víctimas, pero es clave que en estos casos se logren avances en el menor plazo posible.
"En los últimos tres días, donde Iquique fue el escenario de tres balaceras en sectores residenciales".