España, Irlanda y Noruega reconocen Estado palestino y comunidad internacional se divide
Estados Unidos e Israel rechazaron la decisión, mientras que los países árabes celebraron la medida. Algunos europeos como Francia e Italia tomaron distancia y China puso su foco en "alcanzar un alto al fuego inmediato".
Agencias
El reconocimiento de Palestina como Estado por parte de España, Irlanda y Noruega fue acogido con apoyo desigual por la comunidad internacional: desde el respaldo incondicional de los países árabes, hasta el rechazo estadounidense, pasando por el distanciamiento de potencias como Francia o China.
Madrid, Oslo y Dublín hicieron ayer el anuncio -que será formalizado el 28 de mayo y que ya ha sido adoptado por más de 140 de los 193 países miembros de la ONU-, en una decisión coordinada con la que confían en contribuir a la paz y la estabilidad en Oriente Medio.
Israel y ee.uu. rechazan
Israel decidió llamar a sus embajadores en Madrid, Dublín y Oslo en un abierto rechazo a esta iniciativa y su primer ministro, Benjamín Netanyahu, dijo que a la "maldad (de los palestinos) no se le puede dar un país".
Estados Unidos, el principal socio de Israel, mostró también su oposición y un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional afirmó a CNN que aunque "el presidente (Joe Biden) es un firme partidario de una solución de dos Estados y lo ha sido durante toda su carrera", él cree que "un Estado palestino debería realizarse mediante negociaciones directas entre las partes, no mediante reconocimiento unilateral".
El pasado 19 de abril, Estados Unidos vetó en el Consejo de Seguridad una resolución que abría la puerta a la entrada de Palestina como miembro de pleno derechos de la ONU, de la que ahora es solo estado observador.
La resolución presentada por Argelia en nombre del Grupo Árabe de Naciones Unidas, cosechó 12 votos favorables, las abstenciones de Reino Unido y Suiza y el voto en contra de Estados Unidos, lo que subrayó el aislamiento de Estados Unidos frente a la mayoría de la comunidad internacional en este sentido.
Apoyo árabe
Más allá de los agradecimientos y la evidente satisfacción mostrados por el presidente palestino, Mahmud Abás, y de la organización islamista Hamás, La Liga Árabe, integrada por 22 Estados, también mostró su agradecimiento a los tres Estados.
"Saludo y agradezco a los tres países por este paso que los pone en el lado correcto de la historia de este conflicto", dijo el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgheit, en un comunicado en el que felicitó a Palestina "por este paso positivo".
"Invito a los Estados que aún no lo han hecho a seguir el ejemplo de los tres países" que dieron un paso de "principios y valentía", añadió el máximo responsable del organismo panárabe.
Algunos se distancian
Muchos países europeos como Francia o italia se distanciaron del paso dado por sus socios de España, Noruega e Irlanda y, aunque insistieron en su apoyo a la solución de los dos estados -uno israelí y otro palestino-, pusieron énfasis en que no es el momento de su reconocimiento sino de lograr una tregua.
Para Francia, el reconocimiento de Palestina "no es un tabú", pero debe hacerse "en el momento adecuado" para que "sea decisivo", afirmó su ministro de Exteriores, Stéphane Séjourné.
Su homólogo de Italia, Antonio Tajani, dijo que su país "está a favor del nacimiento de un Estado palestino", pero "los pasos que sólo sirven para crear tensión son inútiles".
China -que reconoció el Estado Palestino en 1988- reaccionó al anuncio asegurando que la prioridad es "alcanzar un alto el fuego inmediato" en Gaza.
Liberan video del secuestro de soldados mujeres
Familiares de cinco de las chicas soldado israelíes que se encuentran entre los rehenes de Hamás en Gaza decidieron publicaron el video del momento en el que fueron secuestradas el pasado 7 de octubre, durante los ataques del grupo palestino en la base militar de Nahal Oz, en el sur de Israel. Las imágenes captadas por las cámaras corporales de los combatientes de Hamás muestra a las jóvenes ensangrentadas y maniatadas contra la pared tras ser capturadas por los milicianos en el refugio de la base militar, donde se escondían.