Javiera Tapia Zapata

Playa Cavancha, uno de los destinos turísticos más deseables de la temporada, experimenta un aumento en la presencia de vendedores ambulantes ilegales que, armados con coolers repletos, recorren la extensa arena para ofrecer a plena luz del día bebidas alcohólicas. Este fenómeno, que ha puesto a este popular balneario en el centro de atención, no pasa desapercibido.

En un recorrido realizado por el equipo del diario La Estrella, se constató cómo estos vendedores, de manera disimulada, se infiltran entre los bañistas ofreciendo mojitos y cervezas, generando un ambiente que plantea desafíos a la seguridad y la tranquilidad que caracterizan a este emblemático destino turístico.

La autoridad marítima local informó un aumento del 150% en las citaciones al Juzgado de Policía Local debido a casos de consumo y venta de alcohol en el borde costero de Iquique.

Según el Capitán del Puerto, Cristián Concha, las cifras actuales se acercan a los niveles de cierre de la temporada pasada. Desde el 15 de diciembre hasta el 21 de enero, se ha registrado un aumento significativo en las situaciones llevadas al Juzgado, así como en la cantidad de alcohol incautado en las playas.

En palabras del Capitán del Puerto de Iquique: "hemos estado constantemente controlando y fiscalizando las ventas de alcohol en la playa, la prohibición de fumar y de hacer asado en el borde costero. En este período, hemos observado un incremento del 150% en las situaciones llevadas al Juzgado de Policía Local por venta o consumo de alcoholes, además de un aumento en la cantidad de alcohol incautado en las playas."

Durante este periodo, se han registrado 29 citaciones por consumo de alcohol en la playa, 1 por estado de ebriedad y 21 por venta de alcohol por parte de ambulantes, detalló Concha.

"Se ha detectado un foco importante en el sector de Cavancha, donde se logró incautar 47 coolers o mochilas utilizadas para almacenar y vender alcohol", agregó que la venta principal se realiza entre las tres y las cinco de la tarde, horario en donde han detectado el mayor movimiento de los vendedores ambulantes.

Cristián Concha añadió: "contamos con el apoyo de instructores municipales y Carabineros para llevar a cabo actividades de control y fiscalización conjuntas. Aunque no hemos logrado eliminar completamente la venta de alcohol en las playas, hemos conseguido disminuir significativamente gracias a estas acciones."

Además, han registrado infracciones por consumo de tabaco en la playa, con citaciones al Juzgado de Policía Local, y casos de consumo de drogas que han sido remitidos al Ministerio Público, explicó Capitanía. En comparación con el mismo periodo del año pasado, ya se han incautado 47 coolers en poco más de un mes, por lo que se estima que se supere la cifra total del año anterior, que fue de 59.

Multas

Antonella Sciaraffia, Jueza del Primer Juzgado de Policía Local, explicó que las ventas de alcohol clandestinas, cuando no se tiene la patente correspondiente, conllevan multas significativas de hasta 20 UTM, es decir, alrededor de $1.293.320.

"En caso de reincidencia, la persona puede enfrentar una prisión de 30 a 60 días. También se evalúa una ordenanza específica para sancionar de manera más severa estas conductas", agregó sobre la regulación que hoy se aplica por la Ley de Alcoholes.

Respecto al consumo de tabaco, Sciaraffia destacó que arrojar colillas en la playa o fumar tiene una multa de hasta tres UTM. La jueza expresó su preocupación por la aparición de peleas y actos violentos vinculados al consumo de alcohol en las playas, así como el riesgo de accidentes.

"Es una situación en realidad que ha sido compleja de controlar, que se está investigando el origen porque se ha hecho cada vez más recurrentes sobre todo en los balnearios más conocidos como Cavancha o Playa Brava", agregó que el llamado a la comunidad es no consumir ni comprar bebidas alcohólicas.

"Es una situación que ha sido compleja de controlar (...) el llamado a la comunidad es a no consumir ni comprar alcohol en la vía pública."

Antonella Sciaraffia, jueza