"Hemos tenido un incremento de 80% por traumas como heridas a bala"
El jefe del Servicio de Atención Médico de Urgencias (Samu) Tarapacá habla de los cambios que ha tenido la región en los últimos cinco años, y de cómo se ha fortalecido la red con apoyo de la salud primaria para llegar a más emergencias.
Un aumento en el número de emergencias violentas, y en los accidentes de tránsito, ha experimentado el Servicio de Atención Médico de Urgencias (Samu) en los últimos cinco años, donde los heridos a bala o con armas blancas han crecido en un 80%.
A pesar del complejo panorama el fono 131 no ha dejado de funcionar, y muy por el contrario, como dio a conocer Patricio Berenguela, jefe del Samu Tarapacá, los equipos han sabido dar respuesta a los más de 15 mil movimientos que solo en 2023 debieron ejecutar, dando la cara en situaciones como la pandemia del covid y más atrás, en el terremoto de 2014.
-Hay una realidad regional con emergencias de baleados y apuñalados, ¿todo eso ha ido creciendo?
-Desde el 2019 hasta hoy día hemos tenido un incremento de un 80%, Tarapacá se caracterizaba por tener emergencias prehospitalarias en un 70% de trauma, con trauma me refiero accidentabilidad vehicular, choques, tenemos rutas de alta energía, de alta velocidad como Huara-Colchane, donde siempre hemos tenido muchos lesionados (...) también teníamos las caídas de altura porque tenemos muchos edificios y heridas corto punzantes los fines de semana. Todo eso fue hasta el 2018-19, pero claramente tanto con la explosión migratoria, como por el estallido social empezamos a ver otro tipo de traumas como heridas a bala o por objetos contundentes, empezamos a ver más violencia, y con resultados fatales empezó la tasa de mortalidad también a aumentar.
-Un profesional del Samu en una noche acontecida cuántas situaciones violentas puede atender
-Un fin de semana promedio, normal, hemos atendido de dos a tres pacientes con heridas de bala, lesiones por arma blanca de tres a cuatro, pacientes en un turno de noche de 12 horas, accidentes de tránsito por lo general fines de semana hay un poco más, sobre todo a eso de las 3 y las 5 de la madrugada es cuando aumentan los movimientos, y ahí hemos tenido entre cuatro a seis accidentes de tránsito. Ahora hoy día, en tiempos de verano, esto también se reproduce en días de semana en la noche, antes para nosotros los viernes y sábados eran días duros, pero ahora, un lunes o martes perfectamente en la noche puede pasar este mismo patrón, tenemos alrededor de 96 a 100 movimientos de ambulancia en 24 horas.
-Con esto se infiere que también ha crecido el número de emergencias, ¿reciben más llamados ahora?
-Ahora las lesiones que existen son un poco más complejas, y eso también ha obligado a que el Hospital Regional de alguna forma reciba más pacientes. Yo te puedo resumir que en el año 2011, en un año, Samu atendía alrededor de 9 mil traslados cuando yo asumí la supervisión, hoy día yo hago un recuento anual de al menos 15 mil movimientos a 2023.
- ¿Los equipos Samu también han crecido?
-Samu partió con dos ambulancias avanzadas en el 2002, hoy Samu tiene cuatro móviles avanzados y dos móviles básicos. Cuando me refiero avanzados me refiero a móviles de reanimación con un profesional y con todos los equipos, una UCI andante para reanimar pacientes (...) el Ministerio establece ciertas normativas en cuanto a la cantidad de habitantes, pero nuestra dispersión geográfica hace de que por ejemplo, por cada 50 mil habitantes haya un móvil avanzado, esa tabla quizá para nosotros no nos sirve porque nuestros pacientes son tiempo dependientes, fisiológicamente una persona que pierde sangre y que tiene fracturas múltiples no puede esperar más de una hora de ser intervenido.
- ¿Cómo se contrarresta esta situación sabiendo que hay poblaciones alejadas?
-Una estrategia del Servicio de Salud, del Departamento de Red de Urgencia fue hacer a Samu si hay el administrador de todos los dispositivos de salud de la región, de atención primaria, y cómo se logró, en base una resolución y convenios que generó que nosotros capacitáramos, por ejemplo al personal de Huara, los certificamos y están aptos para entregar la atención que nosotros hacemos usualmente (...) si hay una emergencia nuestro centro regulador se comunica y da la autorización para que envíe dos dispositivos y podamos tener una evaluación general, por mientras nosotros también ya estamos avanzando por tierra, evaluando una aeroevacuación.
-Física y mentalmente ¿cómo están los equipos de trabajo?
- Te lo voy a llevar al tiempo de los espartanos, nosotros somos los espartanos de la red hospitalaria, amamos lo que hacemos, queremos esto, es como el futbolista cuando ama su camiseta y estamos comprometidos, amamos lo que hacemos y es nuestro modo de vida, no es que disfrutemos con lo malo que está pasando afuera para que no se mal entienda, sino que nos gusta trabajar para que otros puedan vivir, es nuestro lema. Nosotros sabemos que no vamos a hacer milagros, pero sí vamos a llegar en un momento complejo de una persona y muchas veces somos los últimos que alguien va a ver antes de morir, entonces nuestra pega la tenemos muy arraigada. En tiempos de pandemia me saco el sombrero por mi equipo porque dio la nota, fueron tiempos difíciles donde fuimos puestos a prueba como en el terremoto de 2014, ahí tuvimos equipos trabajando semanas sin irse a casa porque sabíamos que Iquique estaba lesionado, en el piso.
"Empezamos a ver más violencia, y con resultados fatales empezó a subir la mortalidad
"
"