Leo Riquelme

La comunidad de Angol se volcó a las redes sociales para expresar ayer su dolor por la muerte de tres niños en un incendio registrado durante la madrugada, que junto con destruir la vivienda dejó en estado grave a su madre, una mujer de 28 años que fue trasladada de urgencia a un centro asistencial de Concepción debido a la gravedad de sus heridas.

La tragedia se desató pasada la medianoche en un inmueble ubicado en la esquina de calles Tilao con Mongol, en el sector Huequén, en es comuna de la Región de La Araucanía.

Aunque el hecho estaba ayer en investigación por parte del departamento técnico de Bomberos y la fiscalía, una de las principales sospechas es que el fuego se inició por la inflamación del material que estaba en contacto con el tubo de una estufa a leña de combustión lenta que estaba encendida durante la noche en la cocina-comedor.

El siniestro provocó la muerte de los niños Héctor Gael, de 6 años; Santiago Aquiles, de 8; y Jeremías Alonso Sánchez Astete, de 11 años.

Los tres cursaban kinder, tercero y sexto básico en la Escuela Villa Huequén, donde Jeremías había sido reconocido el miércoles como mejor compañero de su curso.

"Fue por su buen trato y porque había mejorado sus notas", contó la directora, Elena Gaete, quien lo destacó como "arquero y gran deportista". "Esperábamos que él, que era muy protector de sus hermanos, los hubiera sacado, pero lamentablemente no fue así", añadió.

Su colegio comunicó la tragedia con un mensaje que incluía sus fotografías y la leyenda "Vuelen alto, angelitos". Además, suspendió las clases hasta hoy, al igual que el municipio hizo para esta jornada con el carnaval "Angol, con el corazón en la niñez", en señal de duelo .

La cuenta de Facebook de la escuela se llenó de mensajes en recuerdo de los niños y de envíos de fuerza a su madre, quien se encontraba en riesgo vital y fue derivada desde La Araucanía hasta el Hospital Regional de Concepción, ya que mantenía el 15% de sus vías respiratorias con quemaduras.

Uno de los que dejó sus condolencias fue el Club Deportivo Huequén, que recordó que hace tres años el padre de los niños, Héctor Astete, también había fallecido.

En una diligencia que se manejó bajo reserva, carabineros apoyados por militares ingresaron ayer a la comunidad de Temucuicui, donde apresaron a cinco personas implicadas en una serie de delitos, y que de acuerdo a la Fiscalía de Alta Complejidad de La Araucanía estaban involucrados con el grupo radical Resistencia Mapuche Malleco y uno de los apresados participó directamente en el baleo al consejero constitucional republicano René Urban y su familia, ocurrido en mayo.

El ingreso se produjo a las 3.30 horas y buscaba detener a ocho personas, aunque sólo fueron encontradas cinco, que se entregaron sin ofrecer resistencia y sin que resultaran personas heridas.

"Fue un buen procedimiento", dijo el general Enrique Monrás.

En los allanamientos encontraron armas, cuatro vehículos con encargos por robos y municiones. El fiscal regional, Roberto Garrido, dijo que está última era "compatible con la utilizada en los ataques a la familia Urban". El persecutor aseguró que el actuar de los sospechosos era "bastante violento: normalmente atacaban a sus víctimas para la sustracción de vehículos motorizados disparándoles en los pies, y uno de los afectados incluso sufrió la amputación de sus extremidades".

El ministro del Interior (s), Manuel Monsalve, destacó la investigación y el operativo.

Un hombre de 34 años murió ayer cuando recibió un disparo en la cabeza mientras caminaba por la calle en la comuna de La Florida, en la Región Metropolitana. Según testigos, circulaba a las 2.20 por avenidas Trinidad con Santa Raquel, donde desde un vehículo en marcha comenzaron a disparar en su dirección. Uno de los balazosle llegó en su rostro, por lo que falleció en el lugar. La PDI afirmó que no se trató de un robo, pues tenía sus pertenencias. "Habrían sido personas del sector quienes alertaron a seguridad municipal de un altercado que se estaba provocado en esta intersección", dijo el comisario Javier Campos.

El padre de un adolescente que fue secuestrado en Illapel y rescatado 30 horas después por la PDI en Pichidangui aseguró ayer a TVN que su hijo intenta recuperarse de la experiencia, en la que la familia fue extorsionada con la exigencia de 150 millones de pesos, que la policía pidió no pagar, lo que dejó al muchacho molesto porque creyó que su familia lo había abandonado. "Me lo entregaron golpeado, torturado, vivo, pero torturado. Quiero que (estos delincuentes) paguen. Esto no puede pasar en Chile, menos en un pueblo tan chico como Illapel", dijo el empresario Juan Salvador Dabed, quien aseguró que no tenía tamaño monto.