Abordar la violencia
Un nuevo hecho de violencia afectó esta semana a un colegio de Iquique, cuando dos estudiantes terminaron una discusión a golpes e incluso uno de ellos sacó un cuchillo para atacar a su compañero.
Este tipo de actos muestran el grado de violencia que actualmente existe en las relaciones interpersonales y la falta de herramientas que muestran muchos niños y jóvenes para resolver sus conflictos.
Es importante tener en cuenta que la socialización entre pares es cada vez más escasa entre niños, donde la mayoría carece de interacciones con otros, salvo las que se dan al interior de los colegios, ya que la mayor parte del tiempo están en sus casas y el contacto suele ser solo virtual.
Esta falta de interacción cotidiana impide que aprendan a resolver sus conflictos de manera correcta, por lo que los episodios de violencia extrema son cada vez más comunes.
Por tal motivo, es importante que por un lado los padres se involucren activamente en la educación de las denominadas habilidades blandas y que, por otro, esto se refuerce con frecuencia en los recintos educativos, no solo para evitar situaciones de violencia al interior de los recintos, sino que también para que los niños comprendan la relevancia de gestionar sus emociones y así se promueva una adecuada resolución de los conflictos.
Los hechos de violencia en los colegios siempre han existido, no obstante, es clave trabajar en fortalecer la empatía, tanto de los niños como de los apoderados, ya que muchas veces los conflictos parten desde los prejuicios y el comportamiento de los adultos.
Sin duda la labor que se pueda hacer desde el Ministerio de Educación es muy importante y por ello se debe seguir de cerca el cumplimiento de estos programas, así como también evaluar las iniciativas que surgen desde las mismas agrupaciones de apoderados o de los equipos directivos, que son en definitiva quienes más conocen lo que ocurre en cada establecimiento.
De lo que se siembre en los niños y en adolescentes dependerá lo que se coseche con los futuros ciudadanos.
"Esta falta de interacción cotidiana impide que aprendan a resolver sus conflictos de manera correcta".