De forma casi inadvertida el país vivió el último sábado de marzo La Hora del Planeta. A diferencia de lo que ocurría hace algunos años, en esta oportunidad no se vieron grandes convocatorias o por lo menos, la comunidad no se involucró decididamente a esta iniciativa que impulsa la World Wildlife Fund (WWF) o Fondo Mundial para la Naturaleza.

Este organismo encabeza esta propuesta desde el año 2007. "La Hora del Planeta" es una acción internacional de carácter voluntaria mediante la cual alrededor del mundo la población realiza un apagón voluntario durante 60 minutos. El pasado fin de semana estaba programada para las 20.30 horas.

Esta es una de las propuestas relacionadas con la necesidad de cambiar la manera como los seres humanos nos relacionamos con nuestro entorno natural. Una cuestión especialmente pertinente en momentos en que el último informe del panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) da cuenta de que la humanidad está al umbral de un punto de no retorno para poder reparar el daño que ya se ha hecho al planeta.

El caso es que si bien hay muchos perjuicios en términos ambientales que son prácticamente irreversibles en estos momentos, hay otros que se pueden evitar o detener siempre y cuando se tomen acciones urgentes y decididas.

Desde el año 2007 "La Hora del Planeta" se ha planteado como una actividad que "busca que los individuos, las empresas, los municipios, centros educativos y, en general, todas las organizaciones y entidades asuman un compromiso cotidiano con el medio ambiente, adoptando prácticas más eficientes y responsables en el uso de la energía y los recursos naturales, y reduciendo sus emisiones de gases de efecto invernadero".

Sin embargo, es inquietante que este tipo de propuestas que parten con un gran respaldo, con el tiempo terminen diluyéndose. Especialmente en Tarapacá, es importante que las iniciativas relacionadas con el cuidado del medio ambiente no sean solo un episodio o una moda, sino que una cultura permanente.

"Es inquietante que este tipo de propuestas que parten con un gran respaldo, con el tiempo terminen diluyéndose".

El asesinato de la sargento segundo de Carabineros, Rita Olivares Raio fue la gota que rebasó el vaso en los acontecimientos delictuales en el país y marcó un antes y un después respecto a la visión que tienen los chilenos en lo que, y como debe ser el combate contra la delincuencia, y dejó patente el enorme anhelo ciudadano de regresar a tiempos de paz. Quedó claro que la mayoría de los ciudadanos apoya a Carabineros y exige restablecer el orden y la seguridad.

No cabe duda que es deseo de la mayoría ciudadana que se aumenten las penas a quienes ataquen a las fuerzas policiales. Esta gigantesca voluntad de la comunidad marca el regreso a la tradición republicana del país que estima que si hay derechos también hay deberes. Se clarificó la visión de los chilenos respecto de que los derechos humanos, que sí bien se estiman esenciales e irrenunciables, no pueden ser un instrumento destinado a amparar y proteger a delincuentes carentes de respeto por la vida, integridad y salud de los ciudadanos de bien.

Es impresentable que haya tenido que ocurrir otra horrible desgracia para que recién las autoridades de gobierno y los parlamentarios hayan tomado conciencia de cuál es el camino del que Chile nunca debió salir, y hayan activado los proyectos de leyes llamados Nain y Retamal, que se espera sea aprobado el próximo martes por el Senado para que a la brevedad se promulgue.

La inmensa mayoría de los chilenos de bien, de aquellos que quieren a la nación, que desean vivir en un país seguro, en orden y paz, donde exista trabajo y un horizonte de desarrollo y progreso, rinden su sentido homenaje a la sargento Olivares, y con ello a todos los policías, Carabineros y PDI, que con esfuerzo, dedicación, mucha valentía, medios limitados y faltos de apoyo legal y judicial, no trepidan en enfrentar al crimen, reconociéndoles que merecen el mayor de los respetos y que deben ser dotados de las herramientas legales y materiales que les permitan el máximo de efectividad en la lucha en contra de aquellos que no trepidan en usar armas en contra de la ciudadanía o de ellos, de manera que todos podamos vivir protegidos y seguros.

"Quedó claro que la mayoría de los ciudadanos apoya a Carabineros"

Max Barrera Perret, past president Asociación de Usuarios Zofri A.G.1

Muchos destacaron las luminarias que se instalaron en la ruta A-16, ya que además de prevenir accidentes, son una herramienta contra los delitos. Ahora queda generar la misma acción, pero en algunas calles de Iquique.

No da para más

Definitivamente el sector centro de Iquique no da para más y necesita con urgencia trabajos de reparación, embellecimiento y hasta de limpieza. Se pueden argumentar muchas cosas, pero seguir hablando de ciudad turística con esa imagen es cerrar los ojos.

Hace 9 años

Un día como hoy, hace 9 años, Tarapacá sufría un violento terremoto. La ciudad se recuperó de esa catástrofe natural, sin embargo, llama la atención que a nueve años todavía existan deudas pendientes con personas damnificadas. ¿Deberán esperar otro año?