Ya se aparece marzo, pero esta vez recargado por la inflación, por lo que la población tarapaqueña deberá asumir una serie de gastos ineludibles, los que -sin duda- serán mayores a los que hubo en 2022.

Uno de estos es el permiso de circulación de los vehículos particulares, cuyo proceso inició el 1 de febrero y tendrá como fecha límite, para pagar esta autorización, el próximo 31 de marzo.

El valor del permiso de circulación a pagar por cada vehículo lo determina el Servicio de Impuestos Internos.

En ese sentido, el precio se estima de acuerdo a los valores de tasación fiscal correspondientes a cada vehículo para el año en curso, de acuerdo a la marca, el modelo, el año de fabricación y el tipo de transmisión. Por ejemplo, en Alto Hospicio, según datos del municipio, se pagó hasta un millón 500 mil pesos por el permiso de circulación de un vehículo durante el anterior proceso. De todas formas, algunos cobros, dependiendo del modelo, generalmente comienzan desde los $30 mil en adelante.

Si uno calcula que en Tarapacá hay más de 151 mil vehículos circulando en las calles, según datos del último catastro del Parque Vehicular del INE, son cuantiosos los recursos que ingresan a cada municipalidad por el pago del permiso de circulación. Sobre todo en las comunas más grandes, como Iquique y Alto Hospicio. Estos ingresos recaudados van directamente a las arcas fiscales de la casa edilicia en donde se efectúa el pago correspondiente.

Dineros que van al presupuesto municipal, según reveló en 2018 un expresidente de la Asociación Chilena de Municipalidades. Fondos que se distribuyen en los distintos gastos que tiene cada municipio.

Por lo mismo, sería adecuado que gran parte de estos recursos se ocuparán en mejorar calles, pasajes y aceras de las comunas, donde muchas de estas están en pésimas condiciones. Recordemos que la actual Ley de Pavimentación Comunal permite a los municipios, sin la necesidad de presentar proyectos a Serviu, el reparar baches en estos sitios.

Una inversión que es necesaria y la agradecerán los miles de conductores y transeúntes que tiene la región de Tarapacá.

"Sería adecuado que gran parte de estos recursos se ocuparan en mejorar calles, pasajes y aceras de las comunas".

Seguramente han escuchado esa frase que dice: somos todos iguales, pero algunos son más iguales que otros.

Diría que así es la realidad de nuestro país. Algunos son más importantes que otros, reciben más recursos que otros. Es el problema de vivir en los extremos o, simplemente, en regiones, por sobre quienes están más cerca del poder central de decisión.

Cuando hablamos de una nueva Constitución, quienes estamos lejos, esperamos que esta carta de navegación para los próximos 50 años sea más justa y más equilibrada que las anteriores. Que contenga no solo palabras para nuestros territorios, sino que normas concretas de autonomía y decisión.

Una Constitución que sea redactada con tranquilidad, que respete el sentir del país que quiere un Estado de derechos y no subsidiario del poder de los grupos económicos. Fallan las pensiones y llega el Estado. Cuando no fallan, los grupos económicos siguen enriqueciéndose y creciendo a costa de los chilenos.

Tenemos un proyecto de desarrollo que contempla la atracción de importantes inversiones a nuestra región, la concreción de una serie de obras con dineros públicos, programas y planes llevados adelante con fondos del Gobierno Regional y una carpeta de inversiones estructurada, coherente y con sentido de futuro. Todo esto, sin descuidar, por supuesto, las urgencias del día a día que nos golpean y nos dicen que la realidad es aquí y ahora.

El marco en el cual queremos dibujar esta nueva Tarapacá estará dado por la nueva Constitución. De ahí que sea tan importante entregar nuestros apoyos a quienes estén comprometidos con la región y su futuro.

Este próximo 7 de mayo deberemos escoger a nuestras y nuestros constituyentes, y más allá de los expertos y revisores y cuidadores que hayan colocado los partidos políticos, debemos tener voz en esa instancia y claridad en nuestras posturas. Estos momentos no se ven todos los días y puede que de constituciones no volvamos a hablar en muchos años, por eso debemos estar atentos y escoger bien.

Esto será fundamental para el futuro de Tarapacá.

Saludos afectuosos a cada uno de ustedes y sus familias.

"El marco en el cual queremos dibujar esta nueva Tarapacá estará dado por la nueva Constitución. De ahí que sea tan importante".

José Miguel Carvajal, gobernador regional de Tarapacá

No han pasado ni dos meses de este año y ya se contabilizan 14 homicidios en la región. Situación es alarmante, sobre todo porque los niveles de violencia podrían ir escalando. Es tarea de todos evitar un peor escenario.

Alcohol en la playa

Pese a la fiscalización que se hace en el borde costero por parte de la autoridad marítima y policías, las personas se las ingenian para llevar y vender alcohol en las playas de Iquique. Resulta preocupante la necesidad que algunos tienen de disfrutar solo con licores.

Informalidad

Sabido es que en la región, según varios informes del INE, es donde se registra una de las mayores tasas de empleos informales del país. Realidad que parece que se podría acentuar durante el 2023, debido a que las proyecciones para este año no son positivas.