Se trata de un problemática de gran complejidad. La inseguridad que por estos días está desbordada en Tarapacá y, en general, en todo el país, es una de las mayores preocupaciones de la población.

Pese a lo anterior, es algo que va más allá de medidas de corto plazo como las que exige la ciudadanía pero que, sin embargo, el Gobierno debe tomar en cuenta, pues de lo contrario se pueden venir otros problemas. Ya comenzaron las manifestaciones y no se descartan otras de mayor impacto según han anunciado sus convocantes.

Por un lado, es necesario que se muestren medidas efectistas que permitan dar mayor sensación de seguridad, pero esto no tiene porque quitar validez a otro tipo de acciones que está llevando acabo al gobierno con el fin de dar soluciones a más largo plazo.

Actualmente, la ciudadanía exige más policías en las calles, pero es conocida la hay escasez de estos, por el mismo descrédito que existe respecto a esta función en los últimos años.

Por otro lado, se pide cerrar la frontera, medida que, además de ser prácticamente imposible, ha sido parte de una política que no ha dado soluciones, sino que ha acrecentado el número de ingresos clandestinos.

Por último, el estado de excepción, que no fue solución hace menos de un año difícilmente pueda generar impacto en una problemática que tiene que ver con la delincuencia común y que podría acrecentar el problema al instalar en las calles a personal que no está capacitado para cumplir funciones de policía civil.

Sin duda, el Gobierno tiene un desafío complejo. De cómo abordar este problema dependerá su respaldo para afrontar su programa en los años que le restan, sobre todo por el descontento social que está generando.

Es importante que pueda existir un despliegue del Estado en las calles, principalmente en Alto Hospicio, que permita que las autoridades conozcan la realidad y surjan las ideas de cómo abordarla, pues si bien el mayor control permite dar una mayor sensación de seguridad, reducir los delitos también se consigue con mayor desarrollo y que este llegue a cada rincón del territorio nacional.

"Es importante que pueda existir un despliegue del Estado en las calles, que permita que las autoridades conozcan la realidad".

En este mes, lo cotidiano es el descanso. El tiempo de febrero se asocia a las vacaciones y en nuestra región al calor, la playa, paseos, etc.

El tiempo del descanso se enmarca en el ocio, este puede ser destinado, dirigido o programado en las llamadas vacaciones, que son lo contrario a las ocupaciones, el tiempo se diluye en una alternativa de relajo de variadas dimensiones.

Sin embargo, es un tiempo de preparación, la docencia se integra en febrero, tanto la gestión directiva escolar, como la educación superior, en ella se diseñan las fases de los procesos formativos hasta que se integra el equipo docente, como académico también en febrero y se ocupa en el quehacer correspondiente.

Es por ello, la importancia de la gestión a través de la planificación del año 2023, considerando los sucesos del 2022 y la constante problemática de la efectividad escolar, que será revelada por los resultados de la estandarización, esta vez muestral del Simce 2022.

El escenario, debe ser considerado como complejo y ante esa complejidad tomar decisiones de mejora, iniciar con diagnósticos que apunten a la certeza y desarrollar planes de mejora, no solo a nivel escolar que se necesita con urgencia, dado que se vive una emergencia educativa que establezca como prioridad el tema pedagógico.

En este sentido, el Plan de Reactivación Educativa, presentado en enero del 2023, es un ejemplo de ello, mas debe existir la convicción que este tenga un énfasis regional, dada las características de Tarapacá, porque se enmarca en un contexto de pospandemia en una región que tiene problemáticas desde antes del 2020 y, de ellas, variadas son de dos décadas de escenificación.

Por lo tanto, el hacer en febrero debe estar enfocado a los problemas, dado que marzo ya comenzó el año escolar o académico. Febrero es el inicio y el punto que concentra las aristas de los problemas, sus causas, como sus mejoras y, para ello, es urgente que se diseñen acciones que implementen la calidad educativa, la cual, no solo es un discurso o una demanda, sino debe ser una acción real con ejecución evidenciable y eso depende no solo de los niveles formativos a saber docentes y direcciones, sino también del Estado y de la sociedad misma, que debe valorar la proyección de las nuevas generaciones para el futuro del país y en este caso de la región.

"Febrero es el inicio y el punto que concentra las aristas de los problemas, sus causas, como sus mejoras".

Patricio Rivera Olguín,, académico Unap

Deportes Iquique mostró su superioridad ante el cuadro boliviano de Guabirá, goleada que la da un buen golpe anímico de cara al torneo, no obstante, se debe reconocer el bajo nivel que mostró el cuadro visitante.

Manifestantes

Es respetable e importante que las personas se manifiesten por aquello que les aqueja, es lamentable que en cada marcha aparezcan aquellos que buscan sacar provecho del Gobierno de turno o de acomodar las demandas a su conveniencia política.

Presupuesto

Las regiones continuamente están pidiendo recursos para afrontar el desnivel que existe con la Región Metropolitana, sin embargo, cuando estos presupuestos no se gastan en los tiempos indicados se transforma en un arma de doble filo. Hay que mejorar la gestión.