Médico sufre encerrona en servicentro donde cargaba combustible
"No es el primer portonazo que me hacen, incluso antes me habían seguido dos veces", dijo el profesional que había realizado recientemente una cirugía.
Matías Gatica Lindsay
Un médico de la Clínica Alemana sufrió una encerrona en un servicentro de Vitacura, Región Metropolitana. La víctima contó que sus asaltantes "fueron muy agresivos" y aseguró que no "es el primer portonazo que me hacen".
A las 00:00 horas de ayer y luego de salir de su jornada laboral el médico fue abordado en un servicentro de la calle Luis Pasteur, al que pasó a comerse una hamburguesa, cargar combustible a su vehículo y ponerle aire a los neumáticos.
Según relató a TVN, una vez que ya había cargado el auto con bencina se acercaron "tres o cuatro sujetos , al menos uno de ellos con arma de fuego" quienes le cortaron el paso, se bajaron de un Mercedes Benz, le apuntaron, exigieron que descendiera del vehículo y les entregara todas sus pertenencias.
"Eran agresivos en el sentido que me pedían insistentemente que les pasara absolutamente todo, incluso me pedían el cortacorrientes y yo no tenía nada más que entregarles. De hecho, yo ya estaba en el suelo y me seguían apuntando con el arma. Les entregué todo", relató el médico, que había salido recientemente de realizar una cirugía.
Además, la víctima aseguró que "no es el primer portonazo que me hacen, es el segundo, y ya me habían seguido dos veces antes. La vez anterior también me apuntaron en el suelo con un arma de fuego (...) Pese a que te pase tantas veces, es una lástima".
Una vez perpetrado el robo, los delincuentes huyeron del lugar en los dos automóviles de la marca Mercedes Benz en dirección desconocida. Según confirmó la misma víctima, que no sufrió daños físicos, su vehículo no cuenta con sistema de GPS.
La Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones (PDI) se encuentra indagando el hecho para dar tanto con el paradero del vehículo robado como con los delincuentes.
00:00 horas del jueves el médico había pasado a cargar combustible cuando fue asaltado.