Hacienda dice que plan de pensiones beneficiará rentas de hasta $1,5 millones
En Chile Vamos y Republicanos acusaron "ideologización" en propuesta del Gobierno, que incluye el fin de las AFP. Líder de la comisión asesora de 2015 pide claridad en la protección de los fondos y que "renten de la mejor manera posible".
Matías Gatica Lindsay
La reforma a las pensiones presentada por el Presidente Gabriel Boric fue objeto de críticas por parte de la oposición, desde donde acusaron que "no pone en el centro a los trabajadores" y que "le mete mano al 6% que podría ir directamente a los ahorros de los pensionados", cuestionando que la cotización adicional, que pagarán los empleadores, opere como un seguro social con tintes solidarios.
Ayer, el ministro de Hacienda Mario Marcel entregó más detalles sobre la iniciativa y salió al paso a la polémica del 6% extra. El economista insistió en que esta cotización irá en un 70% al pensionado y el 30% restante a un "fondo común", que será administrado por una nueva entidad pública, paralela al gestor de inversiones individuales que el trabajador elija para administrar su ahorro.
El ministro explicó que los beneficios de este nuevo pozo serán recibidos en la futura pensión por los trabajadores que tengan rentas de hasta 1,5 millones de pesos, pero de manera "progresiva".
"Es decir, que en su cuenta recibirán mayores ingresos las personas con más bajos ingresos, que no significa extremadamente bajo", agregó.
Según ha indicado el Gobierno, el tercio del 6% adicional de cotización será destinado a solidaridad, para paliar distorsiones de género, lagunas en el pago de cotizaciones o aportar a personas que han debido dedicarse al cuidado de familiares, entre otros.
Marcel estimó que el aumento final de las pensiones será entre un 30% y 70%, si se aprueba la reforma en las condiciones propuesta.
Oposición responde
La propuesta no convence a la oposición en varios aspectos, pero la crítica común es que el 6% vaya a un seguro social y no a las cuentas individuales de los trabajadores.
"El Gobierno de Gabriel Boric insiste en una reforma ideológica, que no pone en el centro a los trabajadores y el mejoramiento de las pensiones", tuiteó el presidente de RN, Francisco Chahuán. El senador añadió que en el actual sistema "el pilar solidario existe" y lo constituye la Pensión Garantizada Universal (PGU). "Para fortalecerlo hay otras vías, pero no un nuevo impuesto a la clase media", acusó.
Su postura fue compartida por el senador UDI Juan Antonio Coloma, quien afirmó que el "6% adicional que nosotros pedíamos era para que se sumara y fuera un 16% de cotización para mejorar las pensiones", y no "a un sistema de reparto". El también presidente de la comisión de Hacienda del Senado afirmó que ese criterio "es distinto a lo que la inmensa mayoría de los chilenos han dicho en todos lo estudios de opiniones".
Desde Evópoli, y abierto a un cambio en el sistema de pensiones, se encuentra Luciano Cruz-Coke, quien valoró que haya una propuesta para discutir. Sin embargo, planteó que "a veces nos cuesta avanzar porque los proyectos son muy ambiciosos". De todas formas, destacó como positiva "la creación de un ente estatal para que haya una alternativa a las administradoras privadas".
También de Evópoli, pero menos optimista, es el exministro de Hacienda, Ignacio Briones, quien pidió en sus redes sociales "evitar decir que el 10% actual recae sobre el trabajador, mientras que el nuevo 6% lo hace sobre el empleador. En ambos casos recae sobre el trabajador con un menor salario".
Más duro fue el senador de Republicanos, Rojo Edwards, quien planteó que "la reforma previsional es un gran engaño. Debemos separar el aumento de PGU ($250.000) para aprobarlo, y rechazar que nos quiten el 6% del sueldo. Se quieren quedar con el 6% del sueldo de los chilenos. O no son demócratas o no entendieron lo que pasó el 4 de septiembre".
Con ello, aludió a que la mejora de este instrumento está supeditada a la aprobación de la reforma tributaria, algo que defendió el ministro Marcel, que pidió tener una discusión "no ideologizada".
Las afp y bravo
La reforma considera terminar con las AFP para la administración de las cotizaciones individuales, que ahora serán manejadas por un gesto de inversiones que sólo se dedicará a ese fin. El Gobierno ha dicho que las AFP podrán incorporarse al sistema si se adecuan a las exigencias.
El miércoles la presidenta de la Asociación de AFP, Alejandra Cox, dijo en un comunicado que la propuesta "es un retroceso respecto a lo que espera la ciudadanía. Las personas han sido claras en señalar que desean mantener la libertad de elección y la capitalización individual para la nueva cotización".
El excoordinador de la comisión asesora del sistema de pensiones convocada en 2015 por Michelle Bachelet, David Bravo, desdramatizó el fin de las administradoras. "A mí por lo menos no me importa tanto lo que pase con las AFP, a mí me importa que los fondos de pensiones de las personas estén protegidos y que los 250 mil millones de dólares que hay aún renten de la mejor forma posible", dijo a radio Concierto.
El economista pidió también más claridad en el ingreso de las cotizaciones al nuevo modelo y cómo se va a velar porque los dineros crezcan para pagar mejores pensiones. "Hoy sabemos que una parte fundamental no es la cotización inicial, sino la rentabilidad", recordó.
0,5 de cotización adicional para el fondo individual propone la reforma del Gobierno.