Caminos y rutas en mal estado
Una de las grandes quejas de los automovilistas en Tarapacá es el mal estado de los caminos. La problemática se da en todo orden, desde las deterioradas calles de Iquique, hasta las rutas que conectan con las distintas comunas y las regiones vecinas.
Es claro que se trata de una infraestructura que está al debe y que no solo es responsabilidad de municipios, sino también de los ministerios de Obras Públicas y Vivienda y Urbanismo, como del Gobierno Regional.
En un primer lugar están las dañadas calles de Iquique y Alto Hospicio, donde al poco transitar es posible notar que requieren mantenciones a gran escala más allá de los típicos arreglos "parches".
En este sentido, es un trabajo maratónico el que se requiere, no obstante, más allá de ser un problema de recursos, este trabajo acumulado está relacionado principalmente a la escasez de proyectos, que por años no se han diseñado, pese a que la comunidad local ha clamado urgentes soluciones.
En el caso de las rutas interurbanas, es una problemática que tiene relación más de exclusividad del Ministerio de Obras Públicas y su Dirección de Vialidad, que si bien constantemente está trabajando en la mantención de caminos locales, necesita proyectos de mayor envergadura para mejorar rutas que están deterioradas hace décadas y que requieren más que una mantención, un rediseño acorde a las necesidades viales de la actualidad.
En este último caso se habla de la ruta 1, que en diversos tramos hasta llegar a la Aduana de El Loa, presenta serias deficiencias que muchas veces pueden ser la causa de accidentes de tránsito. Lo mismo en la Ruta 5, principalmente en el tramo hacia el sur de la comuna de Pozo Almonte, como otras que conectan con Pica y otras localidad del interior.
A todo lo anterior se suma la ruta concesionada A-16, que tiene cerca de un centenar de denuncias de los usuarios, por un tramo que está en muy mal estado pese a ser una carretera donde se paga por circular.
Los problemas de vialidad en Tarapacá son graves, sobre todo para una región minera y con gran potencial para seguir creciendo, pero que sin dudas, con este tipo de falencias básicas, no está en buen pie para afrontar los desafíos del futuro.
"Los problemas de vialidad en Tarapacá son graves, sobre todo para una región minera y con gran potencial para seguir creciendo".