Comerciante iquiqueña "rifará" su vivienda entre la comunidad
Comerciente busca beneficiar a una persona con su vivienda y las bases se encuentran en una notaría.
Una medida radical adoptó la comerciante Ada Castillo Correa, quien determinó, tras intentar vender su casa en 2020, hacer una rifa del inmueble para que de esta manera, otro vecino pueda acceder a su propiedad a través del azar y poder retirarse junto a su hijo, a lo que considera un "descanso" definitivo.
La propiedad ubicada en calle Berthie Humberstone, desde 2014 es la principal fuente de ingresos de Castillo, por cuanto ese año convirtió en su segundo piso para arrendar habitaciones. Explicó que "la casa la compré en 1997 y era muy diferente, por lo que solo era un parte de la vivienda actual. Después en 2014 construí el segundo piso para arrendar habitaciones, ese ha sido mi sustento porque no pude seguir trabajando como comerciante".
Explicó que una grave lesión en la cadera, por los años de trabajo en la feria, deterioró su salud, a lo que sumó el cuidado de su hijo de 36 años, quien tiene una discapacidad.
Para Castillo esta fue una de las razones que la llevaron a tomar la decisión de rifar la casa, para lo cual cuenta con el apoyo de familiares y amigos, recalcando que se trata de un proceso serio. "La vivienda está al día, no hay deudas de ningún tipo", destacó, por lo que espera que las personas participen en el proceso. Este fue oficializado en la notaría de Darío Chacón el pasado 4 de mayo de este año (repertorio N° 987-2022).
Además acredita ser la propietaria del inmueble, inscrito en el Conservador de Bienes Raíces y el objetivo, según las bases, es vender 20 mil números a 30 mil pesos.
En el documento notarial destaca que "el concurso será válido desde el 10 de mayo al 25 de agosto de 2022; de no realizarse se fija como segunda fecha el 2 de septiembre de 2022. De no realizarse y como última fecha se realizará la rifa el día 30 de septiembre de 2022".
Para los participantes no hay restricciones sobre la cantidad de tickets a adquirir y la compra y venta de boletos se efectuará a través de entrega directa, por mano, de parte de Ada Castillo y en la notaría Chacón ubicada en calle Baquedano. Además se estipula que los vendedores de la rifa serán acreditados con una tarjeta con nombre, logo del concurso y número de Cédula de Identidad.
El abogado y jefe de carrera de Derecho vespertino en la Universidad Santo Tomás, Diego Vásquez, manifestó que si bien este tipo de rifas se están materilizando en todo el país, consideró que las personas deben tener algunos resguardos. "La legislación actual no prohibe los juegos de azar, o actividades que se basen en la suerte y no la destreza, especifica quién puede llevar a cabo. En Chile la Lotería de Concepción y la Polla Chilena de Beneficencia son las autorizadas en juegos de azar, dejando de lado los casinos. Pero al mismo tiempo la norma, deja un espacio para que que corporaciones o fundaciones sin fines de lucro puedan llevar este tipo de actuacione en el marco de la beneficencia".
El académico precisó que en el caso de la rifa de bienes muebles o inmuebles, autos o casas, "no es extraño ver casos a nivel nacional y está motivado por necesidad económica de los dueños o propietarios, pues también es rentable, pues dependerá el número de boletos que se dispondrá al público para saber cuanto recolectar y eso excede muchas veces el valor del inmueble".
Vásquez precisó que quienes participen en estas actividades deben saber las condiciones y tiempos. "Deben saber si se puede traspasar el dominio de esa propiedad... La transmisión del derecho de propiedad se completa recién con la inscripción en el Conservador de Bienes Raíces. Por lo que mientras no medie dicha inscripción no se ha traspasado o no se ha transferido. Y eso puede ocurrir con las rifas, si la persona que se adjudica no logra inscribir en el Conservador, no le es transferido el dominio", acotó.
Explicó que además puede haber un riesgo de ilegalidad por ser un juego de azar que no es de una institución.