Un salto de genialidad
No son pocas las personas que, ya sea con una idea, invento, acto revolucionario o simplemente palabras de motivación, han dado un gran salto a la genialidad que los lleva a quedar marcados en la historia. Muchos menos son los que han podido dar más de uno y en esta ocasión enmarcaremos un salto de alguien que ha dado varios.
Hace prácticamente 106 años, la revista científica Annalen der Physik recibiría un artículo que cambiaría la comprensión del universo para siempre. En 1905, dentro de varios artículos revolucionarios, Albert Einstein presentaría la Relatividad Especial como una primera aproximación de cómo funciona el tiempo y el espacio. Sin embargo, sería en 1916 que completaría este trabajo, presentando su Teoría de la Relatividad General, dando finalmente una explicación a cómo funciona la gravedad.
Con 54 páginas, esto fue un cambio revolucionario después de 229 años de reinado de Newton sobre la gravedad, volviendo a Einstein uno de los científicos más importantes de la historia. Sin embargo, en esos años tenía muchos detractores, incluso Einstein no recibió el Nobel por este logro. No es extraño que en un principio la genialidad se confunda con locura o incredulidad. De hecho, el escepticismo es parte del proceso científico, ayudando a evaluar las nuevas ideas, pero con evidencia, experimentación y, apropósito de relatividad, tiempo prevalece lo que es correcto.
Esto es aplicable a muchas cosas, en especial a todo tipo de ideas, por lo susceptibles que son al cambio. Por ejemplo, estamos pasando por momentos claves de la nueva Constitución, la cual ya está tomando forma y cada vez nos entrega una visión más clara de cómo será el futuro de nuestro país. Pero llegará el punto que, al igual que la naturaleza decide si la Relatividad es correcta, nosotros debemos decidir si ese es el país que queremos.
Como muchas cosas en la vida, las teorías cambian, evolucionan o son reemplazadas por otras que se ajusten mejor a la realidad. Hasta el momento, la Relatividad General prevalece y no quiere ceder a su puesto, pero al igual que con Isaac Newton, llegará el día en que Albert Einstein deba ceder el trono sobre la gravedad, ya sea en un par de décadas o algunos siglos. Los cambios pueden parecer peligrosos o un gran error, pero los errores son parte del aprendizaje, como el riesgo es parte del éxito. Solo el tiempo revelará lo que es un salto de genialidad.
"Los cambios pueden parecer peligrosos o un gran error, pero los errores son parte del aprendizaje (...) solo el tiempo revelará lo que es un salto de genialidad".
Pablo E. González Villarroel,, astrofísico, Universidad de Tarapacá. Explora Tarapacá