Cambios en ley electoral
Tras el cambio al voto voluntario hace casi una década, la participación en las elecciones bajó considerablemente respecto al antiguo sistema obligatorio y, pese a que se sumaron muchos votantes, una gran cantidad dejó de asistir a las urnas.
Ayer, por 141 votos a favor y ninguno en contra, la Cámara de Diputados despachó y dejó listo para convertirse en ley un proyecto que privilegiará que los electores sean designados al local de votación más próximo a su domicilio.
Esta normativa facilitará la participación de los electores, sobre todo para quienes debían recorrer largas distancias para ejercer su sufragio.
La iniciativa tuvo el patrocinio del Gobierno a pedido del Servicio Electoral, que en esa ocasión dijo que espera una aplicación al menos gradual este año, para lo cual se estaría trabajando con un sistema de georreferenciación. Ayer, sin embargo, no se pronunció sobre la iniciativa.
No cabe duda que se trata de un avance que permitirá entregar todas las facilidades para que los votantes concurran a las urnas, ya que en la actualidad la participación bordea solo el 40%, frente a lo que sucede en países europeos con voto voluntario, donde oscila entre el 60% y el 80%.
Actualmente hay consenso en que se debiera volver al voto obligatorio, no obstante, aún se puede perfeccionar el actual sistema para ver si este derecho a sufragio es utilizado por los ciudadanos, evitando que sea el temor a sanciones lo que impulse la participar en las elecciones.
Esta nueva normativa permitirá que se designe un local de votación con el último domicilio electoral de una persona. Además, de no existir información o estar incompleta, se asignaría cualquiera de su circunscripción.
Se trata de un mecanismo que seguramente podría mejorar con el correr de las elecciones, pero que a priori parece ser una buena solución ante la alta abstención, o al menos un aporte al proceso electoral.
Es importante que se pueda avanzar en estas materias y que cada autoridad electa cuente con el mayor número de electores, lo que finalmente dará mayor respaldo al ejercicio de su cargo.
"Se trata de un mecanismo que seguramente podría mejorar con el correr de las elecciones, pero que a priori parece ser una buena solución".