Adultos mayores
El estudio denominado "Situación Laboral de las Personas de 60 años o más" reveló que el 46% de los adultos mayores de la región -que permanecen activos laboralmente- realizan trabajos informales y no cuentan con ningún tipo de vínculo contractual con un empleador.
Según el programa de Conocimiento e Investigación en Personas Mayores (CIPEM), dependiente de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, la tasa de ocupación para integrantes de este grupo etario alcanza un 29,5%, lo que equivale a 14 mil trabajadores. Esto no solo da cuenta de la falta de oportunidades, sino que también de las precarias condiciones económicas que muchos de ellos enfrentar para sobrevivir.
Si bien varios adultos mayores son autosuficientes y buscan fórmulas para continuar activos laboralmente, lo cierto es que las bajas pensiones y el incremento de los gastos para enfrentar la vejez se traducen en un escenario que los empuja a desarrollar algún tipo de labor remunerada. En ese contexto, es cada vez más frecuente verlos atendiendo algún local comercial, un puesto en las ferias libres o establecidas, desempeñándose como conserjes o incluso como reponedores en supermercados o grandes tiendas, entre muchos otros oficios que les ayudan a sobrellevar los altos costos de la vida. Sin embargo, que casi la mitad de esa fuerza laboral no cuente con ninguna tipo de protección, es otra muestra de la inmensa deuda que tiene el país con este grupo de la población.
Esto se suma a los nulos resultados que está arrojando el debate sobre las pensiones, el que aunque viene desarrollándose hace varios años en Chile, sigue sin materializar soluciones concretas y parece estar muy lejos de hacerlo. Lo anterior, junto a otros factores, impide que las personas mayores logren disfrutar de un merecido descanso luego de varias décadas de trabajo. El problema es más serio todavía, si se considera que la población chilena está envejeciendo y que la esperanza de vida aumenta.
Más allá de los típicos discursos de campaña, es momento que se reconozca con obras concretas el inmenso aporte que los adultos mayores realizaron al país. Son ellos, por lo demás, quienes no eluden sus responsabilidades en cada acto electoral.
"Esto se suma a los nulos resultados que está arrojando el debate sobre las pensiones".