Desgaste de los equipos de salud
La pandemia de coronavirus en Chile está en uno de sus momentos más álgidos en la mayoría de las regiones, lo que ha significado no solo ya más de 25 mil fallecidos, sino que también sobre un millón de personas que ha contraído la enfermedad.
Lo anterior ha llevado a un alto desgaste de los equipos de salud, que además de lidiar con extenuantes jornadas y extensiones de sus turnos -principalmente en el caso de los funcionarios clínicos- han deteriorado en extremo su salud mental ante la incertidumbre que genera un posible contagio.
En el caso de Tarapacá la ocupación de las camas críticas ha sido uno de los principales problemas en este sentido, donde además cada vez son más jóvenes los pacientes que llegan a una condición grave a causa de una neumonía covid.
Este año los aerotraslados han crecido 10 veces respecto a 2020, pese a que las camas críticas también se han incrementado respecto a las que había en un principio. Lo normal son ocho cupos y en la actualidad hay 62, de los cuales más de un 90% son covid positivo.
Pese a lo anterior, hay muchas personas que aún son escépticas respecto a la letalidad de este virus, que si bien no es la que tienen otras enfermedades, claramente su fácil contagio hace que sea más peligroso.
Que los fallecidos por esta enfermedad no hayan crecido de forma exponencial, es principalmente por las medidas que se han tomado y por el trabajo de los funcionarios de salud, que de forma rápida han ido aprendiendo sobre cómo tratar a los pacientes.
Es fundamental que exista más conciencia respecto a los efectos de no cumplir con las medidas sanitarias y, de esa forma, aliviar la labor de los equipos de salud, los cuales a pesar de estar al límite, siguen respondiendo a las necesidades de atención.
Tal es el impacto en Tarapacá, que incluso ya se apunta a la búsqueda de profesionales en otras regiones del país y el extranjero.
Todos están claros en que muchos deben trabajar y no pueden quedarse en casa como es el ideal, sin embargo, si se hiciera el lavado de manos regular, la mantención del distanciamiento y el uso correcto de mascarillas, las cifras de contagio serían menores.
"Aliviar la labor de los equipos de salud, los cuales a pesar de estar al límite, siguen respondiendo a las necesidades de atención".