Casi un 30% de los preescolares tiene obesidad en Chile
El número aumentó con respecto al 2019 por efecto de la pandemia, según evidenció Junaeb y Elige Vivir Sano.
Camila Infanta S.
Un deterioro en la salud de los alumnos chilenos se vio reflejado en la nueva entrega del Mapa Nutricional correspondiente al 2020, un año marcado por las clases online y el encierro debido a la pandemia. Y entre las múltiples incidencias que ha tenido el covid en el mundo, también lo tuvo en el peso de, sobre todo, los más pequeños, pues se informó que casi uno de cada tres estudiantes de prekínder, kínder y primero básico tiene obesidad u obesidad severa. El aumento es más preocupante en los niveles socioeconómicos del Gran Santiago más bajos.
Si en 2019 un 23,5% de los estudiantes de colegios en el país tenía algún tipo de obesidad (severa o moderada), ese número llegó al 25,4% en 2020. En la medición se toman alumnos de prekínder, kínder, primero y quinto básico y primero medio. Los índices más altos se ven en los cursos preescolares y descienden con el pasar de los cursos.
"Desde antes de conocer estos resultados estábamos trabajando en una estrategia para detener el aumento de la obesidad de niños, niñas y adolescentes al 2030 y aunque la pandemia nos ha puesto más desafíos, seguiremos en ello", aseguró la secretaria ejecutiva de Elige Vivir Sano, Daniela Godoy. La organización participa del estudio junto a la Junaeb.
Uno de los puntos que más preocupa, es que, tal como en entregas anteriores, las comunas del Gran Santiago más vulnerables socioeconómicamente son las que presentan las mayores prevalencias de obesidad.
Los estudiantes del 1er quintil de la zona tienen un 44% más de probabilidades de tener obesidad que estudiantes de comunas del 5° quintil y los estudiantes del 5to quintil de comunas altamente vulnerables tienen un 22% más de probabilidades de tener peso normal que los estudiantes de comunas del 1er quintil, seis puntos porcentuales menos que en 2019.
Al respecto, el director nacional de la Junaeb, Jaime Tohá, dijo que se ve "una relación muy directa entre vulnerabilidad y obesidad, lo que significa un complejo círculo vicioso pues puede generar consecuencias a la salud, educación, autoestima e ingresos de esas familias en el mediano y largo plazo".
En el otro extremo, también preocupa la desnutrición de los alumnos chilenos, pues si en 2019 ese número llegaba al 1,8% en un año aumentó y alcanzó el 2,6%. El peso normal es el único que bajó en 2020: de 41,2% a 38,2%.