Mauricio Torres Paredes

El presidente de la Asociación de Funcionarios Miguel Torres Navarro del hospital de Iquique, Roberto Eloi, denunció que existen dos equipos de diálisis que no se están ocupando y que, pese a esto, el centro asistencial ha externalizado este servicio a instituciones privadas. Agregó que, en lugar de reparar las máquinas, se compraron equipos portátiles a modo de complemento para algunas urgencias.

"Se instalaron dos plantas de osmosis. Una nunca funcionó. Hoy está en caldera (una especie de bodega al interior del hospital) y se está ocupando para tratamiento de agua para la unidad de esterilización. Luego vino una empresa a instalar otra planta y se le indicó al jefe de mantención que esa empresa no era cien por ciento fiable, porque era especializada en minería y no en pacientes. La planta está en diálisis, pero nunca se utilizó. Lleva ocho años botada", acusó.

Eloi denunció que esta carencia de equipos de diálisis ha obligado al hospital a pagar por servicios externos de privados.

"Se tuvo que hacer compra de servicios, es decir, pagarle a otros centros de diálisis para que los pacientes fueran para allá, teniendo dos plantas de diálisis en el hospital que nunca funcionaron. El hospital tuvo que comprar equipos portátiles de osmosis, en lugar de dejar las plantas operativas y mandar los equipos portátiles a la UCI para atender a los pacientes COVID que se deben dializar", agregó.

HOSPITAL: FONASA PAGA LAS PRESTACIONES

Sobre esta última denuncia, la derivación de pacientes al área privada, la dirección del hospital informó que el recinto no compra este servicio.

"Es Fonasa quien paga la prestación y determina a qué centro va cada paciente. Esto se realiza para apoyar el trabajo del hospital con los pacientes crónicos compensados, ya que la unidad de diálisis (del hospital) se hace cargo de los hospitalizados, crónicos agudos, ingresos nuevos y casos sociales, además del seguimiento de los dializados afuera, a quienes siguen instalando y cambiando catéteres, fístulas y realizando evaluaciones con especialistas", comunicaron.

Respecto a las máquinas, señalaron que el equipo que está en la caldera del hospital pertenecía a la antigua planta de agua que dejó de funcionar en 2012. Luego, y por solicitud de la Seremi de Salud, fue reutilizado con partes de otro equipo de diálisis, ya que no cumplía con las condiciones específicas para dializar.

No obstante, precisaron que está máquina sí se puede utilizar en otros procesos, como en la depuración de agua para las unidades de alimentación y esterilización. El otro equipo de osmosis está en proceso de evaluación para su reparación por la nueva área de mantención del hospital, agregaron.

"Para optimizar el trabajo y aumentar nuestra capacidad es necesario contar con una planta de agua que cumpla con todas las condiciones. Está en proceso de licitación el funcionamiento de dicha planta, el que esperamos nos entregue finalmente una solución definitiva", informó el hospital.

8 años lleva sin funcionar una de las máquinas de osmosis en el hospital regional de Iquique.