"Nos podemos reunir con la otra izquierda, pero eso significa programas comunes"
Cree fue un error que Beatriz Sánchez no fuera candidata a La Moneda y que la decisión de Ignacio Briones fue apresurada; cuenta que él bajó su opción porque no tenía votos en el partido y dice que después del Senado jubilará de la política activa.
Por Patricio Tapia
En su larga carrera política, José Miguel Insulza ha sido varias veces ministro, además de Secretario General de la Organización de Estados Americanos, exagente de Chile ante la Corte de La Haya. En la actualidad es senador del Partido Socialista por Arica y Parinacota, y como tal realiza sus labores parlamentarias de manera tanto telemática como presencial, viajando a su región, no obstante la pandemia, con los cuidados del caso.
También ha sido un nombre dispuesto a la candidatura presidencial en más de una oportunidad, y el suyo lo fue hasta hace unas semanas, cuando los otros que circulaban se habían ido bajando poco a poco, por distintos motivos. Insulza decidió retirar su postulación porque simplemente no tenía los votos suficientes en su partido, señala. Entonces había empezado a sonar la exministra Paula Narváez como presidenciable, propuesta por la expresidenta Michelle Bachelet. El jueves pasado se ratificó a Narváez como la precandidata del PS para la elección presidencial de este año, porque logró generar un "apoyo transversal", al decir de las autoridades del PS.
Insulza cree que Narváez tiene muchas posibilidades, y así lo sostiene en la siguiente conversación. Directo como siempre, también habla de otras candidaturas, de sus actividades recientes, de los problemas de seguridad en el país y en las regiones, de coaliciones políticas y del proceso constituyente.
-Ha estado muy activo presencialmente en su región en estos últimos días. ¿No le tiene miedo al coronavirus?
-No, fíjese. La verdad es que me cuido razonablemente bien. No he tenido problemas, aunque uno nunca tiene que decir que es inmune ni mucho menos y, naturalmente, hay que cuidarse. Pero he tenido que hacer las cosas de mi trabajo, he tenido que viajar a mi región y estuve algunos días por allá. Estoy en la misma situación que otras personas que tiene que salir a hacer su trabajo.
-Y la labor en el Congreso, ¿también la realiza de manera presencial?
-La hago de manera telemática. Pero el gran problema que hay en trabajar telemáticamente es que de repente la exigencia es mayor. Es decir, si antes se tenía una reunión a cierta hora y se desocupaba, podía hacer otra cosa entre actividades, pero al poder conectarse de inmediato en una reunión después de otra, como ahora ocurre, eso deja poco tiempo. Esa es la verdad. Tuve un par de reuniones en estos días y una de ellas era presencial, por lo cual tenía que terminar la primera unos veinte minutos antes para poder llegar donde tenía que ir: si hubiera sido telemática, ni siquiera esos minutos de desplazamiento se consideran, pues lo telemático supone estar sentado frente al computador.
-Muchas de sus actividades recientes tienen que ver con temas de seguridad: ¿es un problema regional o nacional?
-Las dos cosas. Regionalmente, si uno considera la región de Arica y Parinacota, o digamos las ciudades, pues el crimen se da mayormente o es más habitual en las ciudades. La ciudad de Arica ha sido hasta ahora la ciudad más tranquila del norte de Chile, mucho más que Antofagasta o que Iquique. Pero desgraciadamente, en el último tiempo han ocurrido algunos hechos de violencia que han preocupado a la gente y esos temas hay que atenderlos. En lo nacional, me ha tocado presidir la Comisión Bicameral de Seguridad Pública que se creó entre la Presidenta del Senado y el Presidente de la Cámara y tengo que preparar todos los papeles y presidir las reuniones todos los viernes.
-¿Y cuán grave es el problema de seguridad en el país y cómo se está abordando?
-Nosotros estamos trabajando fundamentalmente dos temas, no estoy diciendo que son los únicos. Uno, es la reforma estructural de la policía y su dependencia del Estado. Esto no es solamente la reforma de Carabineros, hay que hacer ajustes también en Investigaciones, pero es fundamentalmente Carabineros y los temas de la especialización, gestión, formación policíaca, carrera funcionaria y la ley que ya se aprobó, sólo falta la Comisión Mixta, sobre probidad y transparencia en la Administración. Ese es el primer tema y nos va a ocupar un buen rato. El otro tema es el crimen organizado, en general, pero centrado en el narcotráfico que es, sin duda, el tema más complejo ahora. Está también el tema del crimen organizado y las armas, pero sobre armas ya está a punto de salir una ley.
-¿Y qué pasa con el proyecto que presentó el presidente Piñera contra el crimen organizado?
-Ese proyecto no lo hemos empezado a ver todavía. Tenemos que examinarlo. El tema del crimen organizado es un tema general. Hay crimen organizado para muchas cosas, por lo que importa distinguir crimen organizado para qué. Ya que hemos hablado de mi región, por disposición del gobierno peruano hace ya tiempo no se vende ropa usada en el Perú, entonces se pasa la ropa usada para venderla en Arica. Es un delito de contrabando y probablemente están organizados para hacerlo, pero no es una cosa demasiado grave. El crimen organizado, a mi juicio, tiene que ver más con formas de crimen. Y los principales son tráfico de drogas, tráfico de armas, tráfico de personas.