OPINIÓN
Día de Reyes
El Día de Reyes se celebra el seis de enero alrededor del mundo. Es una fecha que culmina con las fiestas navideñas y las tradiciones que le dan vida, cambian según el país que las acoja. En Italia los más pequeños dejan calcetines colgados la noche del cinco para recibir los regalos de la Befana, una bruja que viaja sobre una escoba repartiendo dulces a los niños buenos. En España, esto calcetines son reemplazados por zapatos limpios, junto a leche y turrones que esperan la visita de los Reyes Magos y sus obsequios.
Según la explicación de algunos historiadores, la palabra original que fue traducida como "mago" (del persa ma-gu-u-sha), en rigor, quiere decir "sacerdote", uno muy especial dedicado al estudio de la astronomía. Así, lo que uno de los evangelios cita como la llegada de monarcas con "poderes mágicos", como resultan ser los magos, en realidad, se trataba de la presencia de hombres de ciencia. De hecho, la expresión usada en inglés para los reyes magos es "wise men" que quiere decir "hombres sabios".
El rosco de reyes, también conocido como rosca o roscón, es una masa dulce horneada en forma circular, decorada con terrones de azúcar y frutas confitadas. Se parte y se divide entre los comensales reunidos en torno al Día de Reyes. En su interior, se usaba introducir un haba, que luego fue reemplazada por una figurita de porcelana y hoy, es una fabricada con plástico. Lo que no ha cambiado es su significado. Quien encuentra esta pieza sorpresa, será afortunado todo el año.
Al escribir esto, pienso en lo fantástico que sería que, al nacer, todas y todos, sin distinción, fuésemos visitados con regalos de sabiduría y conocimiento entregados por personas de ciencia como el doctor José Masa, la doctora en astrofísica María Teresa Ruiz o el mismísimo doctor Stephen Hawking. En su defecto, todas y todos, podríamos contar con educación gratuita y de calidad.
También pensaba, en cómo cambiaría el mundo si, al menos una sola vez, a todos los niños y niñas pudiera alguna vez, tocarles la fortuna de la sorpresa en el roscón. O en su lugar, contar con igualdad de oportunidades.
Pero en un mundo donde la infancia tiene categorías, las pieles oscuras se funden con la pobreza, el ser arrebatado de los brazos de tu madre y sufrir allanamientos. Mientras que la piel clara y los privilegios te blindan para celebrar fiestas masivas, sin respeto por las normas sanitarias, aún en pandemia.
"Hay tantos niños que van a nacer con una alita rota" dijo Lemebel. Si yo pudiera escribirles a los reyes, mi deseo para el 2021, les pediría alas intactas y fuertes para todos, porque mi deseo es que ninguna niña o niño, se quede sin volar.
"Si yo pudiera escribirles a los reyes, mi deseo para el 2021, les pediría alas intactas y fuertes para todos".
Gisell Godoy Riquelme, arquitecta-MBA