Opinión
Distanciamiento laboral
Los seres humanos en general estamos poco preparados para enfrentar la incertidumbre, cognitivamente hablando requerimos estabilidad, por lo que en función de las propias capacidades y de las experiencias que hemos ido adquiriendo, desarrollamos habilidades que nos permiten adaptarnos. Sin embargo, hay un número finito de cambios que podemos tolerar.
Frente a esto, es posible afirmar que la pandemia nos desestabiliza completamente, al no tener control alguno de lo que sucede y no poder negarla, debido a los medios masivos de información que proveen constantemente un gran mensaje: "No hay nada que podamos hacer para enfrentar esta pandemia".
Esto impacta en las personas y a todos los ámbitos en los que participan, lo podemos ver en el funcionamiento de las organizaciones de todos los tipos, las que han recurrido a las tecnologías existentes para alcanzar sus fines, reemplazando las interacciones propias del desempeño laboral en contexto normal con la modalidad de trabajo remoto.
Si bien es una gran oportunidad no es suficiente para aliviar el escenario económico actual. La tasa de desocupación en el último trimestre es de 12,9%, aumentando 5,3 puntos porcentuales el último año. Esto genera aún más incertidumbre, ya que las personas tienen aún menos garantías que en contextos normales, al no depender sus puestos de trabajo de su desempeño sino más bien del impacto de las fluctuaciones del mercado en sus organizaciones. Lo anterior se traduce en conductas de distanciamiento laboral, aumento de tasas de ausentismo evitable y falta de compromiso con las metas propias y organizacionales, impactando en la productividad, algo que es muy fácil que ocurra, ya que no hay forma efectiva de verificar el cumplimiento de jornada, por ejemplo, dada la reducción de la comunicación y supervisión, lo que genera un clima negativo debido al malestar y la sensación de abandono.
En los casos de organizaciones que han logrado comunicar efectivamente a sus colaboradores y los han hecho parte de las soluciones aumentan las conductas de compromiso organizacional, facilitando medidas intermedias menos dañinas para las personas y la organización, esto ayuda a que las personas se sientan valiosas y necesarias, aumentando la sensación de certeza, lo que nos lleva a pensar que la clave del éxito para superar esta crisis es el compromiso, el que debe involucrar a todos los actores del mercado.
"Esto ayuda a que las personas se sientan valiosas y necesarias, aumentando la sensación de certeza".
Carolina Gajardo,, académica Psicología, Unab