Hackeo a la Clave Única habría iniciado su ataque en agosto
Hecho quedó al descubierto este mes cuando difundieron archivos con antecedentes del Gobierno Digital. Defensa del ingeniero acusado dice que sólo probó el sistema.
Leo Riquelme
En prisión preventiva por tratarse de un supuesto peligro para la sociedad, según estimó el tribunal, quedó ayer Bastián Muhlhauser Aravena, el hasta ahora único detenido por el masivo hackeo perpetrado contra la plataforma de Clave Única, que administra el Gobierno Digital.
La Moneda, la policía y la fiscalía aún desconocen el alcance del ciberataque, aunque creen que no se vio afectada la información personal sensible almacenada en el sistema creado por el Ejecutivo para facilitar la realización de trámites estatales.
Pese a ello, 1,5 millones de chilenos cambiaron sus claves como medida de resguardo.
Según los antecedentes expuestos en la audiencia de formalización por la fiscal Alicia Ascencio, el ingeniero informático de 26 años comenzó a perpetrar el hackeo a partir de agosto, aunque sólo se supo de la intervención el 9 de octubre, cuando difundió por redes sociales junto a terceros dos archivos con descargas masivas de bases de datos exclusivas de la plataforma del Gobierno Digital.
Las pesquisas ahora apuntan a obtener antecedentes de proveedores de servicios internacionales e identificar a otras personas que pudieron participar en el ataque. Se sospecha que hay al menos dos implicados. "Los hechos son de gravedad", dijo la fiscal Ascencio.
"Esto generó impacto nacional, de incertidumbre, de temor, por la difusión de datos personales", agregó el ministro del Interior, Víctor Pérez, quien valoró que la Brigada del Cibercrimen de la PDI detuviera a un individuo a "apenas 14 días" de conocido el delito. Esto, a pesar de que habría comenzado a perpetrarse dos meses antes y sólo quedó al descubierto porque sus autores difundieron la información.
Por tales motivos el sospechoso fue formalizado por los presuntos delitos reiterados de acceso ilegal o espionaje informático; y difusión indebida de información.
Su defensa argumentó, entre otros aspectos, que el ingeniero sólo ocupó "llaves de acceso" para verificar la condición de la plataforma y que no se ha acreditado que él difundiera la información.
Muhlhauser fue apresado el miércoles en una casa de Limache, donde vivía junto a su pareja y gran parte de la familia de ella.
El ingeniero es experto en ciberseguridad y consultor de una empresa relacionada al "pentesting", una especialidad de la informática que consiste en efectuar ciberataques a fin de identificar vulnerabilidades en los sistemas tecnológicos.
El imputado registraba una condena en 2013 por el delito de robo con intimidación, por lo que fue condenado a 3 años de presidio menor.
El director general de la PDI, Héctor Espinosa, aseguró que en este caso trabajaron con apoyo de policías extranjeras y lograron reunir "mucha evidencia concluyente" sobre la eventual participación del detenido en el ciberataque. "Este es un delito bastante complejo y difícil de investigar, pero la PDI tiene las capacidades", sostuvo.
19 años tenía el hoy imputado cuando fue condenado por otro delito. Fue en 2013.