José Durán Portales

Adías de que Deportes Iquique venciera por 2-1 a Audax Italiano y escribiera su segunda victoria tras el retorno del campeonato por la pandemia, llamaron la atención las lágrimas del debutante Juan Segovia que explica que "no tenía palabras, porque altiro se me vino a la cabeza mi madre y mi padre que de pequeño me incentivaron a jugar al fútbol, seguir a los celestes y a luchar por salir a delante".

Segovia de 19 años y criado en el barrio El Colorado comenta la importancia del triunfo ante la situación del club agregando que "fue un desahogo importante por lo que veníamos haciendo como equipo y para lo que estamos buscando, fue un paso para salir de los últimos puestos, ganar confianza y mantenernos en primera".

El cariño que tiene por la camiseta celeste le recuerda que "viajé mucho siguiendo al equipo, mi papá era muy fanático y siempre nos incentivó a amar al club de nuestra ciudad, de donde nacimos. Mi llanto tuvo un poco de eso, porque sentí la emoción de que mi padre se sintiera orgulloso de mí, porque seguimos luchando por dar vuelta esta situación y aparte de jugador yo también soy hincha y sufro cuando veo que las cosas no nos salen bien".

Sobre el sentir de un hincha, Segovia agrega "mi amor por la camiseta es otra cosa, son sensaciones inexplicables que me llevaron a llorar, pero no de pena, más fue una emoción de estar cumpliendo un sueño".

Ante sus inicios y familia, Segovia que hoy vive con sus padrinos y tiene un gemelo en las cadetes de la U. de Concepción, valora que "comencé de los 5 años jugando por Ramón Estay y el 2013 que me fui a Huachipato con casi 12 años. Mi mayor referente ha sido mi papá, pero hoy mis padrinos son de lo más importante, se han portado muy bien y les doy las gracias por todo lo que ellos hacen por mí".

De acuerdo al Club Ramón Estay, Segovia menciona a David Verdejo, indicando que "el me ayudó mucho, me acuerdo que me iba a buscar a la casa, se preocupaba de que no faltara a ningún partido y si no teníamos para viajar, el hacía lo posible para intentar que fuésemos".

El joven lateral izquierdo comenta su sensación de llegar al primer equipo, revelando que en un comienzo "no creía, pero estoy feliz porque llegué en un momento muy bueno, la unión del equipo se nota, hay buenos jugadores y me recibieron muy bien, gran parte de mi adaptación ha sido gracias a todos que me han ayudado".

"Encontré un gran grupo, una gran familia lleno de jugadores experimentados. Para mí es un sueño, ya que de chico seguía a este equipo y saltaba al ver a Rodrigo Naranjo, Mauricio Zenteno y ahora estar compartiendo con ellos es un orgullo", agrega la joven promesa.

Ante la situación de potenciar a los juveniles, el iquiqueño comentó que "se están dando oportunidades que por mucho tiempo no se habían dado, me alegro que el profe le de confianza a los jugadores de casa y mejor aún que nosotros mismos lo vayamos haciendo bien".

"El que es formado en Iquique juega con más hambre y con más ganas, no digo que no todos lo hacen, pero es un amor que se siente cuando uno está dentro del club", indicó Segovia.

Recordando la cuarentena, Juan menciona que "estos meses me he enfocado en entrenar y estudiar, hoy estoy en mi primer año de Actividad Física y del Deporte en la Unap y me he preocupado de mantenerme ocupado para no estresarme".

Sobre sus aspiraciones, Juan Segovia menciona que "pienso primero en dar lo mejor de mí y sacar esto adelante con el equipo y cuerpo técnico, luego quizá jugar en Europa, y lo más importante que sería representar al país".

Cabe destacar que el CDI enfrentará dos partidos muy seguidos, este jueves buscará mantener el triunfo ante la Universidad de Concepción de visita y el próximo martes 20 jugará de local ante Deportes La Serena, que en el papel, ambos duelos asoman como rivales directos.

"Para mí es un sueño, ya que de chico seguía a este equipo y saltaba al ver a Rodrigo Naranjo, Zenteno..."

Juan Segovia