Evelin Aguilar Paniagua

Una nueva versión del operativo "Sonríe con Rotary" inició la mañana de ayer en el hospital Ernesto Torres Galdames donde hasta el viernes 7 de febrero se realizarán cirugías plásticas reconstructivas a niños y adultos, con las que se prevé dar de alta a 14 menores de edad que ingresaron a este programa con malformaciones de oreja.

Así lo informó Osvaldo Carpinello, coordinador del operativo organizado por el Rotary Club Iquique, quien explicó que a este grupo de niños le corresponde el ingreso a pabellón por segundo año para poder concluir sus tratamientos, sin embargo, puede ocurrir que algunos puedan requerir un tercer tiempo, lo cual deberá ser analizado por los especialistas.

"Calculamos que ya con un segundo tiempo hay niños que ya van a quedar dados de alta (...) Esto nos hace sentir felices, porque con la primera cirugía en algo les devolvemos la sonrisa y cuando son dados de alta es porque los niños están normales y para nosotros es un orgullo el decir que no va a sufrir más ingresando a un quirófano", remarcó.

Si bien dijo que se espera llegar a realizar aproximadamente 40 cirugías, Carpinello precisó que este año no se harán procedimientos de labio leporino ni paladar hendido, y que se centrarán principalmente en procedimientos de malformaciones de oreja en niños, aunque también tienen contemplado operar casos de gigantomastias, quemaduras, lunares de gran tamaño, abdominoplastías, entre otros.

Carpinello recordó que estos procedimientos se realizan a pobladores de escasos recursos económicos y que no tienen ninguna posibilidad de hacerse una cirugía en el sector privado donde, por ejemplo, una cirugía de microtia (malformación de oreja) tiene un costo de más de 4 millones de pesos.

El procedimiento

El jefe del Servicio de Cirugía Plástica y Quemados del hospital de Iquique, Marcelo Fonseca, explicó que en el caso de la microtia, es una malformación en que los niños nacen sin el pabellón auricular por lo que a través de las intervenciones quirúrgicas "se recrea una oreja usando cartílago costal, es decir se le saca una costillita, y con tejidos locales vamos armando".

Según dijo, este tipo de cirugía se hace a partir de los seis y ocho años de edad para que los niños no sean víctimas de burla en el colegio.

"Este tipo de procedimiento es súper difícil, se hace en pocos hospitales de Chile porque requiere especialistas y subespecialistas como cirujanos plásticos que se dediquen a las malformaciones congénitas", destacó el médico y agregó que estas intervenciones tardan entre dos a tres horas.

Son dos pabellones del hospital regional donde se ejecutan las operaciones en las que trabajan cinco médicos del servicio de cirugía plástica del hospital regional y dos especialistas que llegaron desde Concepción y Santiago para sumarse a esta iniciativa social.