Francisca Cabello Iriarte

Una de las mujeres del momento y que ha dado de qué hablar durante esta semana en el espectáculo nacional es la ex Miss Chile Camila Recabarren. Todo partió con una publicación en su cuenta de Instagram donde aparece junto a una mujer, en cuyo texto dio cuenta de su orientación sexual.

"Como me encanta el mar, como me encanta la arena y el sol, me encantan las mujeres. A la cuenta de tres... 1,2,3... tortillera... Sí, pero inmensamente feliz", fue el mensaje que escribió en su perfil de la red social.

Debido a su presencia en el Casino Dreams de Iquique, lugar donde pudo compartir junto a la gente, sacarse fotos y animar con su espontánea personalidad que sacó carcajadas entre los asistentes, habló en exclusiva para La Estrella sobre el momento que está viviendo.

-¿Cómo se ha sentido con todo el apoyo que le han brindado sus seguidores?

-Eso me da calma a la hora de subirme al escenario, siempre hay un poquito de nervios, obvio, pero me tranquiliza porque la gente que viene justamente me sigue, entonces también en el día me doy el tiempo. Siempre pido un vuelo que venga no tan justo en la hora para poder pasear por Iquique, hoy día (miércoles) fui a patinar. Siempre que vengo traigo mis patines porque me encanta la ciclovía de acá y siempre fomentando el deporte a través de mis redes sociales, mientras trabajo, veo a mi hija y todo se puede complementar bien.

-Ha bromeado con querer ser animadora, pero ¿qué es lo que quiere realmente Camila Recabarren?

-Siempre tengo metas en mi vida. En el básquetbol llegar a la selección chilena, llegar a la televisión o ser Miss Chile. Hoy en día no me encuentro con una meta fija, estoy en un proceso de buscar y en una etapa más personal, en un trabajo más espiritual y requiere su tiempo, que hagas una pausa y parar un poquito con todas las otras cosas, los proyectos que a veces te nublan la visión y estoy en ese período. Por mientras sigo en mi Instagram siendo como soy, genero también trabajo porque así también estoy vigente. Hoy al fin y al cabo todos están en Instagram y como tú me dices tengo muchos seguidores, soy una de las más seguidas y eso también me genera trabajo. Pero también es una zona de confort que a mí no me agrada mucho, aunque pronto se vienen nuevos proyectos, sobre todo en Turner que es donde yo más pongo las fichas. Es porque todavía no me sueltan, yo estuve de panelista en el matinal (de Chilevisión) en el verano, pero sigo en contacto con mi exjefa, estamos en un proceso de crear proyectos.

-¿Cómo ha sido tener que vivir también el acoso por internet?

-Por eso las redes sociales tienen cosas positivas y cosas negativas. Yo estoy tratando de potenciar siempre lo positivo, pero también está la gente negativa que te está criticando que son los comunes y corrientes, que a todos nos critican en redes sociales o en la vida misma, pero están estas personas que se obsesionan contigo (...) A mí lo que me pasó es que una persona puntual o quizás muchas o un grupo que no sé quiénes son, aunque he tenido mis sospechas siempre pienso que pueden haber más que se obsesionaron conmigo y muchas veces me han tratado de amenazar. Me han amenazado con que cuente el tema de mi orientación pero al final yo decidí no pescar nomás, porque al final en la PDI y todo eso no hay una ley tipificada todavía que sí debería haberla, entonces no saqué nada con ir a la PDI a poner la denuncia por ciberacoso.

-¿Tenía miedo de transparentar tu condición sexual?

-Sí obvio que tenía miedo pero por la sociedad chilena que no está preparada todavía para esto, pero como tuve miedo también soy súper valiente, entonces esa Camila la pilló volando bajo y fue como 'ya, ahora lo hago' y lo hice. Como que no la pensé mucho, de hecho lo hice y me cagué de la risa porque dije 'parece que la jodí, pero no importa, ya está'. Siempre estuve luchando, como pensando que no porque me van a dejar de seguir, voy a perder pegas, porque mi familia no me va a aceptar, porque la gente ya no me va a querer. Todo eso lo pensaba, entonces creo que la solución era ser valiente y solamente hacerlo para poder por fin vivir libre y sin miedo al qué dirán. A mí nunca me ha importando mucho pero a la hora de que son temas más importantes sí es difícil por la familia sobre todo (...) De verdad estoy feliz, hay temas siempre pendientes que son a tratar pero de eso se trata la vida, de ir caminando y enfrentando los problemas.