Coincidencia

Aunque fue un hecho fortuito y las instituciones siguen funcionando, llamó la atención que tres de las principales autoridades de la región estuvieran de viaje durante el último fenómeno atmosférico que complicó a Tarapacá. Por suerte no pasó a mayores.

Despejado

La lluvia se llevó todas las nubes que se apreciaron durante el jueves en Iquique y ayer el sol estuvo implacable. Muchos que salieron abrigados en la mañana se encontraron con un clima veraniego durante todo el día.

Centros de salud

Si bien se pueden anegar las viviendas de Iquique, es impresentable que centros de salud, colegios y otras dependencias públicas se lluevan. Existen los recursos para mejorar estos recintos y que estén 100% operativos cuando ocurre una emergencia y se debe atender a la población.

6 de abril de 1999

El abogado Hernán Millán manifestó que los querellantes apelarán al Primer Juzgado de Letras de Iquique para aumentar a $50 millones las indemnizaciones a 11 de las 28 familias que perdieron seres queridos en la explosión de la industria Cardoen en Alto Hospicio en 1986.

6 de abril de 1999

El Servicio de Salud suspendió por tiempo indefinido el funcionamiento de los restaurantes ubicados en el Paseo Lynch. La medida se hizo efectiva ayer en la mañana, cuando personal de la institución procedió a la instalación de carteles que indicaban la resolución sanitaria.

Lluvias: llegó la hora de prevenir

El 9 de febrero nos sorprendimos con una lluvia que en dos horas anegó la ciudad. El agua caída era superior a lo que sucede en una década, las rutas se cortaron y el suministro eléctrico fue intermitente en varios barrios de la ciudad y hasta hubo víctimas fatales.

Ayer y a solo dos meses del primer fenómeno se dio uno de características similares, donde si se extendía más allá de las dos horas que duró, las consecuencias hubiesen sido peores. Hubo varios choques, una persona que sufrió una descarga eléctrica e incluso se suspendieron las clases.

Frente a este tipo de episodios, donde además no hay certezas de cuándo se repetirá producto del denominado "cambio climático", es importante estar muy preparados. Actualmente hay un proyecto de vías aluvionales, además de otros estudios que permitirán saber cuáles son las debilidades en la región en el caso de precipitaciones.

Pero más allá de estos proyectos se requiere que las autoridades propongan un plan que permita preparar a la población regional para estos fenómenos.

En primer lugar invirtiendo en las techumbres, instar a la sanitaria a mejorar la red de aguas lluvias, contar con calles sin hoyos, con el fin de reducir el riesgo de socavones, además de informar a la población de cómo actuar ante este tipo de fenómenos.

Así como se ha instruido a la población de cómo estar preparados para un terremoto, los iquiqueños también se pueden capacitar con el objetivo de afrontar de la mejor manera una lluvia. Al mismo tiempo se debe trabajar en apoyar a los residentes del interior, quienes, si bien están mejor preparados para hacer frente a este tipo de situaciones, muchos de los pueblos siguen quedando aislados ante las precipitaciones.

Hay que tener en cuento que el tiempo se acabó, ya todos sabemos que las lluvias pueden ocurrir de manera más frecuente de lo que se sucedía hace algunos años, donde los grandes fenómenos se registraban cada casi una década años.

Es necesario actuar ahora, antes de que ocurra algo más grave, donde se deban lamentar mayores desgracias.

"Hay que tener en cuento que el tiempo se acabó, ya todos sabemos que las lluvias pueden ocurrir más frecuente de lo que se producía hace algunos años".

Los usuarios, como empresarios, somos optimistas, otros dirán, ingenuamente optimistas. Varias veces nos ha pasado que hemos confiado en ejecutivos nuevos y en autoridades nuevas. Grande ha sido nuestra desilusión posterior.

Cada vez que hay nuevos gobiernos, nuevas autoridades y nuevos ejecutivos, hemos confiado en su quehacer. Mirando en retrospectiva, son muchas las veces que nos hemos equivocado al atribuirle capacidades que luego resultan inexistentes, especialmente en sus intereses e intenciones, y por ende en sus resultados.

Es por eso que tantas veces insistimos que los directores de Zofri y sus ejecutivos deben ser gente local, con sentimientos de arraigo, que sean nuestros pares y que los podamos seguir viendo mañana a la cara con sus aciertos y errores.

En mi opinión, como la de tantos otros, la administración de Zofri siempre ha sido una zona de gran confort para sus directivos y ejecutivos, una especie de limbo. Un antiguo usuario del sistema franco tiene acuñado un dicho: "En la administración hay un perverso virus y todos los que llegan se contagian". El resultado para Iquique y Zofri es malo, sobre todo en sus perspectivas.

Profundizando e investigando esta zona de confort, sus causas están muy arraigadas en la dependencia de Corfo, la protección del gobierno de turno y por ser un monopolio estatal no regulado, cuyo resultado siempre lo arreglaron subiendo precios, aun cuando a cambio han ido deteriorando el servicio. Ejecutivos y directores han gozado de extraordinarios sueldos, dietas y granjerías de todo tipo en el gasto y prebendas. Entonces, ¿qué ocurre con los nuevos ejecutivos? Llegan a esta zona de confort, con sus números casi siempre asegurados. Y son tantos las problemas creados, por acción u omisión, que tratan de arreglar algo y como muchos de estos se tienen que arreglar gastando, ya no se pueden superar salvo que exista una férrea y decidida intención de hacerlo, que es lo que deseamos de esta nueva administración.

"Es por eso que tantas veces insistimos que los directores de Zofri y sus ejecutivos deben ser gente local".

Felipe Illanes Petersen,, director, Asociación Usuarios Zofri A.G."