Denuncia que quedó con dolores crónicos tras una cirugía bariátrica
Iquiqueña asegura que tras la intervención ha vivido un calvario físico y económico.
Naguib Danilla Segovia - La Estrella de Iquique
Un verdadero calvario es el que asegura vivir la iquiqueña Ximena López Rojas. Esta mujer de 46 años tuvo que lidiar gran parte de su vida con una obesidad mórbida, que en la última década le acarreó varios problemas de salud.
Por lo mismo, la decisión que tomó el 1 de junio de 2016 no era cualquiera: se realizaría una cirugía bariátrica en la Clínica Tarapacá, específicamente un bypass gástrico. Intervención quirúrgica que meditó con todo su entorno, ya que poseía una insulinorresistencia, una esteatosis hepática o hígado graso, una disfunción metabólica y había sufrido un cáncer mamario.
Comentó que veía en el bypass gástrico la puerta a una nueva vida. Más sana y alejada de la obesidad. "Tenía una obesidad mórbida de 104 kilos. Mi hospitalización iba a ser de dos días, lo que lleva normalmente la cirugía, y resultaron ser 28 días de hospitalización grave", dijo.
Según informe médico de la aludida clínica, la paciente al realizarse el bypass gástrico se le instaló un trocar que le produjo una herida infracostal izquierda, lo que le originó un dolor neurálgico de carácter invalidante, que no cedió con analgésicos habituales.
Por lo mismo fue derivada a otro galeno del recinto clínico, quien le realizó infiltraciones para paliar el intenso dolor posoperatorio. Esto derivó en un dolor neuropático severo, según comentó Ximena López.
"Me dieron morfina directamente a la vena, pregabalina (...) luego otro doctor toma el caso y me dice que me iba a hacer unos bloqueos para suprimir el dolor (...) me contó que iba a perder la sensibilidad de la 'guatita'. Me dijo que no iba a sentir dolor (...) termina la neurolisis y le dije a mi esposo que sentía mi 'guatita' pero no sentía la pierna izquierda y parte de mi vagina", relató.
Estimulador
A causa de los dolores que -según dijo- eran cada vez más intensos, Ximena López recurrió a un neurólogo en 2017, quien le diagnosticó una mielopatía por daño parcial cordonal que le provocó invalidez, y limitación en su marcha. Lo anterior está certificado por el mismo Compin, quien le decretó un 60% de invalidez en un grado severo. "No puedo caminar más de dos cuadras", aseguró.
Debido a sus molestias se fue a tratar al Hospital Clínico de la Universidad de Chile, donde tras varios tratamientos le realizaron un implante de un estimulador que genera impulsos eléctricos que alivian el dolor. Intervención de última generación y de un costo de más de $30 millones.
"Son procedimientos demasiado caros, que no están al alcance de todas las personas", concluyó López, quien desea esclarecer su caso.
Por lo mismo, actualmente tiene demandada a la Clínica Tarapacá. Ingresó una causa en el Ministerio Público en abril de 2017 por cuasidelito de lesiones cometidos por profesionales de la salud. Caso que confirmó Fiscalía local, que aún tiene diligencias pendientes, y que están esperando los informes del Servicio Médico Legal, para determinar si existe mala praxis o no.
Su abogado, Cristián Gallardo, detalló que también existe una demanda civil por incumplimiento de contrato con indemnización de perjuicio. Causa que se está tramitando ante el Primer Juzgado de Letras de Iquique y está por iniciar su etapa probatoria.
"Nosotros pedimos (una indemnización) por daño emergente en cuanto a daño material, por los gastos que ha sufrido, y daño moral. En la demanda se pidió un monto total cercano a los $300 millones", concluyó.
En la Clínica Tarapacá aseguraron a este Medio que su vocería en este caso sería a través de la Fundación de Asistencia Legal del Colegio Médico de Chile (Falmed), organismo que no se refirió al tema por ser una instancia reservada de investigación.
2016 fue el año en que se realizó el bypass gástrico la paciente Ximena López.