Santo Tomás de Aquino, cuya fiesta se celebró el 28 de enero, fue un fraile profundamente comprometido con la universidad. Estudió y enseñó en París y Nápoles, los que destacaban como centros culturales de su tiempo. Enseñó también en Colonia, Roma y Viterbo.

Pero podemos preguntarnos, ¿Para qué universidades? En una época en la que todo parece estar en crisis, la institución universitaria no es una excepción. Si muchas veces nos encontramos con una realidad inquietante, al haber formado buenos profesionales y éstos no logran instalarse en la empresa o en el puesto acorde a sus conocimientos por la disminución de vacantes requeridas.

Allá en la Baja Edad Media, la universidad nació como una comunidad de buscadores de la verdad. "Comunidad", mientras se alza el individualismo. "Buscar", mientras los fundamentalismos de distinto cuño dicen poseer toda verdad. "Verdad", mientras se alza la mentira, no solamente abierta y descarada, sino la mentira sutil, enmascarada, muchas veces convirtiéndose en una ideología.

La universidad medieval perseguía la verdad para el bien del hombre. La Orden de Predicadores a la cual pertenecía Santo Tomás, tenía como lema la palabra "veritas", y se había fundado para la predicación y la salvación de las almas. Los frailes estudiaban y lo hacían como ocurre hasta nuestros días, para "ser útiles a las almas de los prójimos".

La pregunta que nos realizamos al comienzo, ¿Por qué las universidades? La podemos responder con la doctrina de Santo Tomás acerca de la persona y la educación, ya que hasta la actualidad siguen inspirando nuestro quehacer.

El gran ejemplo de Santo Tomás nos ayuda a seguir su modelo para cumplir nuestra misión educativa, en la que docentes, bien preparados, proponen, exigen, y ayudan a cada estudiante para crecer y lograr sus metas.

Hoy especialmente pedimos su intercesión por la institución y por cada uno de nosotros para seguir su ejemplo.

"El gran ejemplo de Santo Tomás nos ayuda a seguir su modelo para cumplir nuestra misión educativa".

Hugo Fernández, director de formación e identidad de U. Santo Tomás"

Aunque los expertos hablan de que la ola de calor debería terminar hoy, lo cierto es que la sensación térmica no cede en Iquique. Los que no han salido de vacaciones esperan con ansias el fin de semana para un chapuzón en Cavancha.

Falta de coordinación

Mientras una banda del Ejército rendía un tributo a los Beatles por su último concierto hace 50 años, Aduanas realizaba a pocos metros una actividad y un músico callejero, a un costado, trabajaba con un parlante. Una mixtura de sonidos que a ratos no se entendía.

Refrescos

Pese al calor, muchos comerciantes insisten en vender sus bebidas y jugos casi a temperatura ambiente. Es necesario pensar en los clientes y aunque salga un poco más cara la cuenta de energía, deben subir el nivel de frío a los refrigeradores y otorgar un buen servicio.

El pasado 7 de diciembre una persona murió en Alto Hospicio por intentar robar cables eléctricos en el sector El Boro.

Si bien la noticia causó conmoción en la región, debido al riesgo que asumen personas, principalmente en situación de calle, por obtener el cobre para vender, el fenómeno ha seguido generándose en la comuna.

Si bien la compañía eléctrica CGE ha desarrollado un plan para que estos robos no continúen y así poder asegurar también la continuidad del suministro, al parecer, el negocio es lo bastante lucrativo como para no parar, incluso a costa de vidas.

Pese a que se trata de un delito que a simple vista no puede evitarse, es importante que las autoridades vayan más allá de buscar a quienes realizan los robos, sino a quienes reducen el cobre, ya que mientras existan empresas que compren estos cables, no se acabará el problema.

Las empresas que reducen estos robos saben claramente que hay una procedencia dudosa, por lo tanto son tan responsables como quienes los roban.

Es importante que exista un mayor control a este comercio y frenar lo más pronto posible la generación de un mercado negro de este tipo de insumos que produce inseguridad para los vecinos del sector donde se desarrollan los ilícitos.

Al mismo tiempo, también está la problemática de los cortes de energía que afectan a varios sectores y en forma repetida, que en el caso de familias que tienen parientes enfermos que dependen de la electricidad o departamentos con sistema de elevación de agua, se ven mayormente afectados.

Por lo anterior, es necesario que la comunidad se involucre más en el tema, denunciando los robos, pero también la venta de cobre irregular.

Es importante, entonces, frenar el fenómeno antes de que se deban lamentar otras muertes o personas lesionadas, sobre todo por que muchas veces estos robos se cometen en zonas aisladas de Alto Hospicio, donde es difícil que los equipos de emergencia puedan llegar a tiempo para socorrerlos.

"Es necesario que la comunidad se involucre más en el tema, denunciando los robos, pero también la venta de cobre irregular".