De acuerdo a los informes realizados a comienzo de año por el Ministerio de Justicia, de las 250 residencias colaboradoras del Sename, entre 2017 y 2018, 17 fueron cerradas por falta de recursos.
Esta situación afectó a más de 470 niños, quienes, dependiendo de su situación fueron derivados por los tribunales de familia a otras instituciones o se ordenó su egreso definitivo del servicio para que vuelvan a sus casas, sin tener solucionado los problemas por los que fueron separados en un principio.
No dejemos que esto vuelva a ocurrir y garanticemos a los cientos de niños un hogar digno, no antepongamos ideales por sobre la vida y el futuro de ellos.
Juan Pablo Arellano C.
Grandes sueños
Cuando niños tenemos una imaginación casi infinita que nos lleva a vivir en un mundo imaginario, lleno de juegos y colores, en el que muchos niños y niñas se imaginan siendo cuando grandes los profesionales más diversos, las profesiones más entretenidas e incluso inventadas.
Esas visualizaciones, esos sueños de cuando niño de ser astronauta, bailarina de ballet, modelo, piloto de Fórmula 1, futbolista e incluso niñera de tiernos pandas o koalas, lamentablemente, con el pasar de los años, se pierden en el silencio.
Sin embargo, el soñar debería ser una habilidad blanda altamente demandada, pues si no existieran grandes soñadores la realidad actual sería muy distinta. Soñar en grande debe ser un valor que se preserve y potencie desde niños, porque sí, la vida es dura, para algunos más que para otros, pero también es cierto que no hay nada que se pueda lograr si no se hace algo para conseguirlo.
Soñar en grande no necesariamente implica soñar con ser el primer hombre en pisar un planeta de otra galaxia. También podría ser convertirse en el primer médico de su pueblo o emprendedor de un hostal boutique en una localidad rural. Eso lo determina cada persona, lo importante es que sea el sueño correcto, es decir, no se puede soñar con hablar inglés sin internalizar lo que implica el lograr dominar este idioma, las horas de estudio que se deben dedicar a aprender, la inversión financiera que quizás se deba hacer, entre otras cosas.
Soñar, como la vida, no es fácil, la gente suele temer a soñar porque es más sencillo pensar que no podrán conquistar sus sueños. Sé ambicioso, sueña en grande, Chile necesita que como sociedad cambiemos de mentalidad y potenciemos el soñar desde nuestras semillas, para así seguir desarrollando el país.
Hernán Leal Barrientos
Director de empresas,
empresario y speaker