Vladimir M. Hanshing

Cientos de niños de la región tuvieron cerca de dos semanas para dibujar y colorear un megaterio. El animal, extinto hace más de 12.300 años, habitó un sector ubicado entre el actual camino que une Pica y La Huayca. Los huesos del cuadrúpedo fueron descubiertos en 1959, pero no fue hasta este año cuando volvió a la memoria de los tarapaqueños con la exposición llamada "El Megaterio del Tamarugal" en la zona verde del mall Zofri, donde el animal se podía ver como una réplica a tamaño natural junto a su depredador natural, el dientes de sable. Ese era el desafío que tenían los jóvenes de Tarapacá: recrear a través de la pintura al mamífero antediluviano.

Luego de que el concurso cerró, tres serían los flamantes ganadores: Natalia Valdivia de 17 años, Ragnarok Fuentes de diez y Joaquín Vásquez de seis.

La alegría del triunfo

La más experimentada de los triunfadores no tenía acercamientos con el arte durante sus primeros años. Un día cuando estaba en el jardín, una de las parvularias llamó a su madre para decirle que su hija "no dibujaba", pero a los cuatro años ya hacía bosquejos en un computador, recuerda su madre. "De repente, de la noche a la mañana comenzó a dibujar", recuerda su progenitora Patricia Barahona.

La joven que cursa cuarto medio piensa estudiar algo relacionado con las artes y, según comenta Barahona, este es el primer reconocimiento que logra Natalia fuera de su establecimiento educacional. Además el hecho de poder ganar el premio la motivaba, aunque sabía que no sería fácil.

"Ella no cría que iba a ganar y yo le decía que tuviera fe. Era difícil porque uno no conoce el trabajo de los demás niños. Creo en mi hija porque sé el potencial que tiene, da todo cuando ella lo quiere", comentó orgullosa Barahona.

Otro que también festejó fue Ragnarok Fuentes (10), a quien le costó cerca de ocho horas finalizar el cuadro y utilizó lápiz pastel seco para colorear, técnica que aprendió en el liceo artístico Violeta Parra. Su madre, Mirtha González, cree que matricularlo en dicho establecimiento fue la mejor idea para Ragnarok. "Le gusta y por lo mismo lo puse en ese colegio, yo lo tenía en otro colegio y a mediados de año de primero básico lo cambié porque la verdad no la pasaba bien en el otro colegio, le impedían mezclar colores y esas cosas", señaló la madre del joven que cursa cuarto básico.

El más joven de los artistas, Joaquín Vásquez, fue el que pintó en menor tiempo al megaterio. Él se demoró alrededor de tres horas y lo hizo con lápices de palo y cera. Cuando anunciaron a los ganadores, su madre, Evelyn Lazcano, dice que no lo podía creer. "Estaba sorprendida. Yo le había dicho que solo una persona iba a ganar y que sería difícil. Cuando me llamaron quedé sorprendida y él estaba gritando, feliz, contento", recordó la madre de Vásquez.

"Mi mamá me contó del concurso, de ahí vi unas fotos porque no sabía lo que era un megaterio. Me costó dibujarlo".

Ragnarok Fuentes, artista de 10 años que ganó el concurso de pintar al megaterio."