El bienestar de los párvulos y escolares
Hoy comienza el paro indefinido de 692 manipuladoras de alimentos que trabajan en establecimientos educacionales de la región. Adoptaron la medida luego de no recibir una respuesta oportuna sobre lo que están exigiendo: un bono de zona extrema, el mismo que reciben las trabajadoras de Magallanes y la Antártica.
El sindicato de manipuladoras de alimentos de Iquique, Alto Hospicio y del Tamarugal informó que esta paralización de sus funciones afectará a cerca de 30 mil párvulos y estudiantes porque no recibirán sus raciones de alimentos.
No obstante, el gremio ya acordó la entrega, durante dos días, de colaciones y leche a los más pequeños de sala cuna. Sobre el resto, no hubo respuesta.
Para establecer una solución a su demanda, las manipuladoras se han reunido con el intendente Miguel Ángel Quezada y parlamentarios. Sin embargo, han expresado que los compromisos de palabras no se han traducido en acciones inmediatas, por lo que se han sentido abandonadas.
Ante la movilización, la directora regional de la Junaeb, Claudia Camacho, dijo que rechaza "este tipo de presiones" y que los estudiantes de la región son la prioridad para el gobierno.
En ese sentido, para no dejar sin sus alimentos a los escolares y párvulos, explicó que "se considerarán todas las medidas para llegar (el día de hoy) con la alimentación de este grupo de niños más vulnerable". Comunicó además que durante la paralización de todas formas se entregarán raciones.
Es esencial, en tanto, que ningún lactante, niño o joven se quede hoy y durante los siguientes días de la movilización sin sus comidas, las cuales son esenciales para rendir de manera óptima durante la jornada escolar.
A pesar de la validez de lo exigido, que está asociado a mejorar la calidad laboral de las manipuladoras, los menores no pueden quedar expuestos a situaciones en que su salud puede resultar perjudicada.
Las autoridades deben crear un plan de contingencia que logre un equilibrio entre las demandas de las trabajadoras y el bienestar de los cerca de 30 mil párvulos y escolares.
"Los menores no pueden quedar expuestos a situaciones en que su salud puede resultar perjudicada".