Si bien la coordinación para la visita Papal, tenía presupuestado instalar unos arranques de agua potable para los puntos de hidratación de los peregrinos, esta semana, debido a que los plazos no se concretaron, se optó por un segundo plan.

Al respecto, Aguas del Altiplano, indicó que en Lobito, "instalaremos 2 estanques de 2 mil litros en cada una de las 16 parcelas demarcadas por la organización. Por lo tanto, a disposición de las personas del recinto habrá 64 mil litros de agua, los cuales mantendremos con la reposición constante de camiones aljibes".

Asimismo, la empresa, señaló que aportarán además con 13 estanques de mil litros en el recorrido de Lobito a Iquique, donde "los voluntarios coordinados por la organización estarán a cargo de la entrega de agua de estos puntos".

Finalmente, la empresa sanitaria manifestó que otra de sus tareas será el mantener la continuidad del servicio en Iquique y Alto Hospicio. "Estamos trabajando en asegurar los sistemas productivos, de distribución y disposición de aguas, es decir, toda la infraestructura sanitaria; redes de agua potable, alcantarillado y plantas de tratamiento]", puntualizó.

Mariela Cabello Venegas

Menos kilómetros que el promedio de lo que los peregrinos caminan para asistir a un encuentro papal, tendrán que recorrer en Iquique, todos quienes decidan acudir a la misa que oficiará el Santo Padre el próximo 18 de enero.

Según informó el coordinador local de la visita del Papa, Sergio Villalón, la media a nivel mundial es de 3,2 kilómetros, pero en Iquique, habrán dos sectores donde las personas deberán desplazarse a pie.

"La iglesia no está convocando a peregrinar, pero si por un tema de logística y organización se han dispuesto dos sectores de estacionamiento. Uno, antes de llegar a Lobito, aproximadamente a 1,5 kilómetros para autos particulares, y otro en Los Verdes, que es para transporte público a 2,7 kilómetros de distancia", señaló, quien aseguró que es una manera muy similar a lo que ocurre en las fiestas de La Tirana y San Lorenzo, donde la locomoción queda a una distancia de donde está la fiesta.

Flexibilización

Consultado sobre lo que los peregrinos pueden llevar al campus para que su estancia sea más cómoda, Villalón, recalcó que la invitación es para todos, sin importar credos religiosos.

"Es una invitación fraterna y de puertas abiertas, para todos, por lo tanto pueden llevar sombrillas individuales para protegerse del sol, pueden llevar asientos plegables para no permanecer todo el tiempo de pie, pueden llevar sacos de dormir o mantas de polar para poner en el suelo y descansar", expresó.

Villalón, recomendó mantener una alimentación adecuada, que no requiera refrigeración y en una cantidad que vaya acorde a la cantidad de horas que se permanecerá en el sector.

"Se les sugiere llevar 1 litro de agua, si quieren llevar más háganlo, solo cuidando que no sea en botellas de vidrio, porque se puede quebrar y puede provocar algún daño a otra persona. Harto bloqueador, lentes de sol y los celulares bien cargados, porque van a tener cobertura", señaló.

Las entradas

El coordinador, además, llamó a la comunidad a descargar las entradas para la misa a través de https://entradas.franciscoenchile.cl

"Es fácil y ni siquiera es necesario que las impriman, pues pueden llevarla en el celular como los tickets de los aviones", indicó.

Finalmente, Villalón, invitó a que las personas vayan con tranquilidad. "Va a caminar si, y es como todas las visitas papales y ojalá poder convertir esa caminata como parte de la fiesta, de la visita, de la experiencia histórica", comentó junto con adelantar que se trabaja en gestionar buses de acercamiento al campus, para los adultos mayores.

Para esta jornada se espera la visita del subsecretario del Interior Mahmud Aleuy, quien recorrerá el sector de Lobito.

El escenario para esta visita histórica que usted nos hace lo dispuso el Creador que hace nuevas todas las cosas.

La huella de lo sagrado late en estos salares, en los bofedales, en nuestro mar... ¡es creación viva que alaba y glorifica!

Dios nos habla a través de este paisaje compartiéndonos algo de su hermosura. Nos permite vivir la experiencia de esta inmensidad despojada en la que el alma no encuentra otro apoyo, sino Dios. Esa ventana abierta a un cielo eternamente despejado donde astrónomos del mundo entero, cada noche, escudriñan las estrellas y se adentran en los misterios celestiales de la mano de la ciencia humana.

Sabemos que nuestra casa común, nuestra hermana la madre tierra, no es naturaleza muerta sino creación viva que alaba. Neruda no pudo decirlo mejor : "Escuchad el sonido quebradizo de la sal viva, sola en los salares, el sol rompe sus vidrios en la extensión vacía y agoniza la tierra con un seco y ahogado ruido de sal que gime". Sí, Santo Padre, a veces nuestra tierra agoniza y gime porque la pisoteamos, la herimos, dejamos las cicatrices de nuestra avaricia. También herimos a nuestras comunidades al no cuidar las normas de impacto...