Una comitiva de peruanos residentes en Iquique viajó a distintos pueblos del norte de su país para entregar ayuda a las familias damnificadas por las inundaciones ocurridas este año.

De acuerdo a lo señalado por los organizadores, en abril se realizó una "mega pollada", con la que recaudaron $3.560.000, para comprar víveres para sus compatriotas.

Así, una comisión llegó a los poblados de Santo Domingo, Venado Muerto, Purmacana y Negreyros, en la campiña de Supe a más de 4 horas al noreste de la capital, Lima.

"Se cumplió con el objetivo, se llevaron víveres a más de 500 familias, la gente estuvo muy agradecida ya que sus poblados habían sido arrasados por los aluviones", señalaron los organizadores.

Asimismo, agradecieron a la comunidad peruana, empresarios, trabajadores y a todos los iquiqueños que aportaron.

Mauricio Torres Paredes

A los 85 años dijo su adiós definitivo Alfonso Ramos Cholele, dueño de la empresa local de transportes que lleva sus dos apellidos y que hoy cubre tramos por todo el norte de Chile hasta Santiago.

Tras sufrir de un cáncer, el empresario falleció a las 17 horas del viernes. Ayer sus restos mortales fueron velados en su domicilio ubicado en Juan Martínez, y hoy serán llevados hasta su pueblo natal, Mamiña, donde espera ser sepultado.

El mamiñano nació el 29 de octubre de 1931 y se inició como transportista en la oficina Victoria donde vivió. Desde ahí comenzó los primeros recorridos de su empresa a nivel rural entre esa salitrera e Iquique. El 28 de abril de 1948 inició su empresa con la compra de su primer vehículo de pasajeros. Actualmente la empresa cubre desde Arica a Santiago e intermedios.

Su hija Jeannette Ramos, contó que su padre siempre valoró a sus antecesores desde la humildad a pesar de haber conformado la empresa.

"Eso lo atribuyó siempre a sus padres. Por el esfuerzo de ellos él pudo tener su primer vehículo", relató Jeannette.

Sus inicios

Aunque en un inicio los trayectos eran locales, después la empresa salió de la región. Así se ampliaron paulatinamente los recorridos de la flota, primero hacia Arica y Antofagasta, luego a La Serena y finalmente a Santiago, cubriendo hoy todo el norte del país hasta la capital.

"Teniendo 14, 15 años, incluso menos, él quería manejar un vehículo, le gustaban. Nos contaba que iba a una maestranza en la oficina Victoria como trabajador, cumpliendo horario, pero no le pagaban, solo con su coraje de querer aprender. Se hizo un hábito de estar presente. La gente puede decir 'cómo fue tan tonto', pero yo creo que fue inteligente porque sabía que él iba a aprender algo que después le iba a servir para su vida. Sacó su licencia de conducir. Tuvo el primer vehículo, usado, viejito, y después empezó a adquirir otros más", agregó su hija.

Así se inició en el rubro con transportistas de otras empresas de buses locales, Tarapacá, Carmelita, Cuevas y González, Evans, con las que además se apoyaban porque todas estaban aprendiendo.

Alfonso Ramos Cholele tuvo cinco hijos, Claudio, Rita, Nadia, Jeannette y Paola Ramos Flores, con quienes formó una familia junto a su esposa Olga Flores Andrade.