Mauricio Torres Paredes
Temprano llegó ayer al Tribunal de Garantía de Iquique el abogado y vicepresidente de Renovación Nacional, Eduardo Riquelme, para presentar cinco querellas contra el diputado local, Hugo Gutiérrez, del Partido Comunista, por "acusación calumniosa".
La presentación se hizo en base a las denuncias que presentó en su momento el propio Gutiérrez contra la exalcaldesa de Iquique Myrta Dubost y la exintendenta de Tarapacá Antonella Sciaraffia, a quienes se sumó la exabogada de la Municipalidad de Iquique Pilar Sepúlveda. En total son cinco acusaciones, dos de Dubost, dos de Sciaraffia y una en el caso de Sepúlveda.
"En el banquillo"
Riquelme explicó que fue contactado por diversas personas para hacer valer el derecho a "preservar su honor", asegurando que Sciaraffia fue absuelta y que a Dubost se le desestimó la acusación.
"El diputado Gutiérrez ha hecho abuso del derecho a querellarse en contra de diversos adversarios políticos. Dado que esas querellas no han llegado a puerto y han sido desestimadas por el Ministerio Público o los tribunales de justicia, nace el deber de él de responder por el daño que le ha causado a muchas familias. Se deben investigar estos hechos, pedir su desafuero y sentarlo en el banquillo de los acusados", dijo.
"una VENGANZA"
Respecto a las acusaciones de que instrumentaliza el sistema judicial de forma reiterada y sistemática para afectar la reputación de sus adversarios políticos, como acusó Riquelme, Gutiérrez reconoció que este acto "es la reacción de una derecha chilena y regional que entiende que una de sus tareas principales es impedir que yo siga como parlamentario".
"Hay un objetivo que responde claramente a los intereses de Sebastián Piñera. El abogado de Chile Vamos busca una venganza hacia mi persona por haber presentado la querella contra el ex presidente, lo que sin duda le ha impedido seguir marcando mejor en las encuestas. Han recurrido a buscar a gente que tiene rencillas en mi contra para representarla", sostuvo el también abogado comunista.