Mariela Cabello Venegas

Desarmar vitrinas, llenar cajas con productos que no lograron vender y sacar cuentas luego de diez días de trabajo fueron algunas de las labores que realizaron ayer los locatarios de la tradicional Feria Navideña de Iquique.

Pese a que los comerciantes estuvieron por largas horas desempeñando su trabajo, promocionando sus productos y atendiendo a las personas diariamente hasta más allá de las 3 de la madrugada, a la hora de los balances las cuentas este año no fueron alegres.

Según sus primeras apreciaciones, este año fue peor que el 2015, lo cual atribuyen, además de la situación económica existente en el país, a la proliferación del comercio ambulante en la ciudad.

"Soria dio chipe libre a los ambulantes y eso nos perjudicó. Sin pagar nada pudieron instalarse y vender libremente incluso lo mismo que nosotros, pero mucho más barato, porque ellos no pagan el local, ni los impuestos", señaló Isabel Ruiz, comerciante por más de 30 años en la feria.

En este mismo contexto, Juana Vega agregó que otros años era común que el mismo 24 de diciembre en la noche, la Feria Navideña tuviera movimiento, situación que no se vivió este 2016.

"A las 12 de la noche e incluso a la 1 siempre se estaba vendiendo, pero aquí no había gente a las 11 de la noche y en el centro estaba lleno. A mí no me molesta que a la gente le den espacio para vender, pero que se cobre algo, porque debe ser la ley pareja para todos", sostuvo Vega.

Comerciantes de Zofri

Otro de los grupos que experimentaron ventas bajas respecto a años anteriores, fueron los comerciantes del mall Zofri.

En este sentido, rubros como la tecnología, perfumería y juguetería, manifestaron que los distintos paros impidieron que las ventas fueran las esperadas.

Rafael Salas, gerente de ventas Intermed, precisó que este mes, las compras en el rubro de los televisores y tecnología fueron como las de un mes normal y no con el incremento de las fiestas de fin de año.

"El tema del paro, primero portuario, después aduanero y finalmente de cargadores, nos afectó mucho. El flujo del cliente argentino que nos mejoraba un montón las ventas y los de Bolivia, no se pudieron concretar."

Asimismo, Salas indicó que el cliente fue mayormente chileno, que no compra como el argentino de a 2 o 3 televisores. "Fue un mes bueno, pero no como se esperaba, las ventas bajaron un 30% de lo que se esperaba", estimó.

Por su parte, Claudia Aravena, vendedora de Andigraf 1008, comentó que ellos se quedaron con buena parte de la mercadería que adquirieron.

"Como la Zofri estaba cerrada la gente que vino de afuera o los mismos chilenos que querían hacer las compras antes, se fueron a las grandes tiendas, porque veían que avanzaban los días y aquí esto no se abría".

Trabajadores

Por parte, de los trabajadores, Fabiola Ramírez, vendedora de Vicencio y directora del Sindicato N°2 de Trabajadores de Zofri, precisó que en general las ventas no fueron buenas, pero recalcó que fue el paro de los cargadores lo que más incidió. "Nuestros primeros días son las ventas que se hacen a las instituciones, el pequeño detalle a mayoristas por decirlo de alguna manera. Como local no nos fue mal, pero podría haber sido mejor", dijo.

En cuanto a las cifras oficiales de ventas de Zofri, aún están recopilando la información, al igual que la Cámara de Comercio de Iquique que espera entregarla en los próximos días según acotó su presidente, Rafael Montes.