Cambio de pañal: una tarea diaria pero de cuidado
Evitar que los niños permanezcan por tiempos prolongados con el pañal sucio es la recomendación principal.
Evelin Aguilar Paniagua - enfermera
Mudar de pañal al bebé es una tarea que comienza desde el primer día en que nace y que se prolonga, en algunos casos, hasta después de los dos primeros años.
Por ser una labor cotidiana, los padres no deben restarle importancia; por lo tanto es importante tener algunas consideraciones respecto a los tiempos y modos de cambio de éste.
La enfermera Yohanna Wong explica que si bien no existen parámetros que indiquen cada cuanto tiempo hay que revisar el pañal, se puede esperar hasta el momento de amamantar porque después de esto los niños suelen orinar. Según la profesional, el lapso de tiempo para poder estar al tanto de lo que sucede con los niños puede ser cada dos horas. Si defecó, el cambio de pañal debe ser inmediato.
Lo ideal -según explica la enfermera- es no dejar transcurrir más de 15 minutos desde que los niños ensucian el pañal. Esto hay que hacerlo, luego de asegurarse que terminaron sus necesidades fisiológicas.
El riesgo de mantener a los niños por tiempos prolongados con el pañal sucio es que desarrollen pañalitis o dermatitis, es decir, que la piel de esa zona se irrite volviéndose rojiza y haciendo que aparezcan escamas, grietas y, en algunos casos, sangre.
"Esto se produce por el cambio de pH en la zona genitourinario, favoreciendo la proliferación de bacterias u hongos", remarca.
De igual forma, Wong agrega que se debe tener cuidado con el aseo que se le realiza a los niños al cambiarles el pañal para así poder evitar infecciones. En el caso de las niñas se limpiar desde la zona anal hacia los labios de la vagina; en tanto en el caso de los varones, siempre lavando la zona genital sin retroceder el prepucio.
"Es aconsejable utilizar crema protectora, no polvos de talco. En las niñas hay mayor riesgo de infecciones urinarias", puntualiza la enfermera.
"(La pañalitis) se produce por el cambio del pH en la zona genitourinario, favoreciendo la proliferación de bacterias u hongos".
Yohanna Wong
Consejos útiles
Cuando los niños ensucien el pañal y estén en casa, se recomienda limpiarlos con agua y un jabón muy suave o algodones, así se podrá mantener el pH balanceado. Hay que asegurarse de limpiar muy bien los pliegues de la piel para evitar posibles irritaciones.