Ayer más de mil personas asistieron a la ter cera subasta nacional de Aduanas de Chile, que congregó a gente de todo el país que vino con dinero en efectivo para adjudicarse los más de 619 lotes que dispuso el ente fiscalizador.

Fue el caso de Enrique Soto, que vino desde Chillán para llevarse un vehículo a la ciudad de la Octava Región. "Quiero llevarme una camioneta van, ya que en Chillán no se ven esos vehículos y la quiero ocupar con la familia", dijo el chillanejo.

A Soto le llamó la atención la gran multitud que se apostó en el salón acondicionado para hacer la subasta en dependencias del Hotel Gavina. "Lo único malo es que hay mucha gente, pero todo vale por llevarse un 'autito' a buen precio", comentó.

Opinión similar que compartió Juan Rojas, empresario local, que se adjudicó una camioneta Nissan Frontier liberada del año 2005 a $4.000.000.

"Me lo llevé más que nada por un tema de trabajo, ya que tengo una empresa de reciclaje y de equipamientos mineros".

Otros de los afortunados que alcanzaron adjudicarse algún vehículo a buen precio fue el santiaguino Milton Joao Sepúlveda que se adjudicó un Nissan Versa del 2003.

Aunque no todo fue felicidad por adquirir algún vehículo de la subasta, ya que hubo cientos de personas que no alcanzaron a entrar al salón por estar repleto, pese a que llegaron a las 9:00 horas, tiempo de llegada establecido por la organización.

"A las 9:00 nos cerraron la entrada y dicen por ahí que había mucha gente dateada para ingresar", denunció Marcelo Astorga quien venía por un auto deportivo que vio en el catálogo de lotes a subastar que dispuso Aduanas.

Respecto a esta situación, el capitán Jorge Castillo de la Primera Comisaría de Carabineros de Iquique, detalló que lo anterior se produjo porque la gente llegó temprano a esperar la apertura de las puertas de la subasta.

Sobre las personas que quedaron afuera del lugar de la subasta, Aduanas explicó que el evento fue mucho mejor que en años anteriores, donde solo hubo 500 personas asistentes.

"Superó todas nuestras expectativas en cuanto a asistencia de público, esto confirma que este año hay más disputa de los lotes por lo que deberíamos sumar una buena recaudación", precisó Raúl Barría, jefe del Departamento Técnico a cargo de la subasta.

Asimismo el trabajador de Aduanas confirmó que la masiva asistencia se debió a los vehículos liberados que había este año.

"Vinieron de todas partes del país a ver los autos que teníamos en los lotes, por estar exentos de cargos aduaneros. Era una gran atracción para ellos", acotó.

La subasta duró aproximadamente 10 horas y recaudó $630 millones, superando con creces los $378 millones, que Aduanas se había puesto como meta, ya que fue lo que logró en el anterior remate. De los 619 lotes, diez no tuvieron postores, uno fue eliminado y ocho fueron rescatados. J