El presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, acusó a un grupo de alcaldes de realizar una "acción coordinada" con el objeto de facilitar el traslado de docentes disidentes a la asamblea extraordinaria del Magisterio.

El dirigente sostuvo que los jefes comunales financiaron el viaje de este grupo de opositores para aumentar el número de representantes de la disidencia interna dentro del gremio en el cónclave. "Aquí ha habido una acción privada de muchos alcaldes que han financiado estos buses y que han traído gente para venir a enlodar, a entorpecer la labor de la asamblea", reclamó Gajardo.

Incluso identificó a los presuntos involucrados: "Le doy nombres concretos: la alcaldesa de Tomé (Ivonne Rivas), Curicó (Priscilla Castillo), Tocopilla (Fernando San Román), Calama (Esteban Velásquez), Los Ángeles (Esteban Krause), concretos".

Las sospechas de Gajardo radican en la duración de las movilizaciones realizadas en las comunas mencionadas: "¿Por qué se han prolongado tanto los paros allí?", cuestionó el dirigente.

Gajardo negó divisiones en la directiva interna y defendió su labor en el gremio. "Esta mesa no se ha quebrado, el movimiento sigue fuerte. Ocurre que hay una asamblea nacional con absoluto respaldo a la directiva actual.

Tenemos 2/3 arriba, esa es la proporción hoy", recalcó. "Lo más notable es que hemos avanzado, que se ve claramente que el colegio está dando pasos hacia adelante y que está caminando. Nosotros estamos para solucionar los problemas del gremio", destacó Gajardo.

Desde la disidencia, el prosecretario del gremio, Mario Aguilar, negó cualquier tipo de intervención política y explicó que algunos miembros se retiraron de la asamblea porque estaban en contra del mecanismo de voto. J