Primero dos cosas: La clase política nacional, no es la peor del mundo, ni está permanentemente enlodada por casos de corrupción; más aún, y en general, quienes están dedicados a ella tienen un más que aceptable nivel educacional, en propuestas y en comportamiento cívico.
Vale la pena destacar primero aquello, para comentar el hecho político de los últimos días: aquel relacionado con el financiamiento de la política y las suspicacias que genera, muchas de las cuales, ciertamente, tienen asidero.
Hoy, Chile parece no tener una normativa transparente y por eso debatimos si es el Estado quien debe financiar completamente para evitar opacidades que terminen perjudicando a todo el sistema.
Recientemente se conoció que la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (Ocde) presentará el informe titulado "Financiamiento de la democracia: aporte a mejores políticas públicas y prevención de la captura de la política".
La entidad internacional realizó un estudio sobre el sistema de financiamiento de la política en los 34 países miembros y una de las conclusiones es que de la totalidad de países integrantes, sólo Suiza carece de algún tipo de financiamiento público, o sea, proveniente del Estado, a campañas y/o colectividades.
Como se sabe, Chile mantiene un mecanismo de aporte público sólo en épocas electorales, entregando reembolsos a todos los partidos e independientes que participan de una elección.
Pero la dificultad está sobre el financiamiento privado, muchas veces "desconocido" que logran algunos candidatos y que generan riesgo de influencias indebidas y la corrupción. En muchas ocasiones ese "desconocimiento" de tales remesas es difícil de comprobar, aun cuando existan límites para los aportes.
Naturalmente ningún sistema es perfecto, pero el nuestro es todavía perfectible, en el entendido, primero, que no se trata de un desperdicio de recursos, sino de proteger el sistema democrático.
Lo relevante es aquello, junto con evitar posibles filtraciones desde sectores que sólo buscan comprar poder e influencias.